capítulo 3

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Le observé durante unos minutos hasta que aparte la mirada, el seguía viéndome fijo.

—¿Vas a contestar o no?— Respondio secamente con el ceño fruncido.

—Me voy a dormir.

—No me dejes con la palabra en la boca—. Refunfuñó.

—Tu sabrás.

—Por estás cosas deje de ser tu amigo—. Dijo ya bastante irritado.

Le ignore, lo mejor era ignorarle.

—Esta bien, está bien, tú haz como siempre que me ignoras que haré lo mismo q hizo Alex.

Me quede inmóvil, no gire ni la cara para mirarme siemplemente le dije lo que tenía que decirle.

—Si en algún momento de tu vida haces eso que sepas que no te perdonaré en la vida—. Solté sin más dilación, ya enfadada y con el ceño fruncido.

—Pues no me ignores.

—Yo hago lo que me da la gana.

—¿Sabes que? Paso de ti—. Lo dijo ya enfadado que al meterse el la cama rompió un poco las sábanas del tirón que les dio.

Ya por fin, estando en la cama de lado enfrente de el, pude observarle mejor su rostro.

Su cabello normalmente era castaño claro pero al estar mas oscura la habitación se veía castaño oscuro, sus facciones estaban bien marcadas, entre ellas, su mandíbula, que Dios, no sé porque pero me fascinaba, siempre me ha fascinado el y su manera de ser y ver. Justo en ese momento abrió los ojos para mirarme.

Nos quedamos mirando durante un rato, pero me empezó a entrar sueño y empezé a decaer.

El seguía obsévandome, lo notaba, por esos aunque tuviera los ojos cerrados no podía dormir.

—¿Puedes dejarme de mirar? Necesito dormir y no puedo pprbtu culpa.

—Vale—. Lo dijo tan bajito que casi no le escuché.

Y por fin, pude dormir, pero no fui la única, el también se durmió.

                         ***

—¡Claudia por ahí no es!—. Grito el profesor.

Demasiado tarde, ya me dado la ostia monumental del siglo. Y encima todos se estaban riendo, que buen día.

—Vais a dejar de reiros a las buenas o a las malas. Supongo que preferis a las buenas.

Dejaron todos de reírse y la que comenzó a reírse fui yo.

—Que risa más macabra..

—Si, da miedo..

—Deberian meterla a un manicomio..

Esos fueron los comentarios a mí estupenda risa.

—¿Asi? Mi risa es macabra, ¿no?. Bueno, pues vuestra risa es de burro y no me quejo de vosotros—. Me reí todavía más.

                           ***

Ya después de terminar todas las actividades de ese día, fue inmediatamente a mi cabaña, no aguantaba estar mucho tiempo rodeada de gente.

Agarre el móvil y me puse a ver Instagram. Angelo había subido una historia besándose con una chica, pero no una cualquiera, si no Rebeca, la maldita zorr- digo la popular que se liaba con todos los chicos del instituto, obviamente, no hace falta decirlo, pero lo recalcare, con chicos GUAPOS, chicos GUAPOS.

Porque los "feos" no le gustan.

Pero sin embargo liga con los feos, porque normalmente son los que sacan buenas notas, es decir, los nerds, como los llama ella, y la verdad es que la iba de esta chica me da lo mismo, que haga lo que le dé la gana.
Pero que Angelo se esté liando con ella en este momento me está comiendo por dentro, con otra me da igual, PERO CON ELLA, LA MUY ZORRA..

MENTIRA PERFECTA arruinada (EN CURSO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora