Perfect BL Ost [Yoonmin]

06

—Taehyung, creo que hemos hablado mucho de mí. ¿Cómo van las cosas con tu trabajo?

—Bastante bien. Muchas de mis obras ya están en exhibiciones y museos. Nunca pensé que en algún momento la gente se interesaría tanto en mí.

—Sin duda te lo mereces. Pero también quería preguntar ¿Por qué nunca muestras tu rostro?. El otro día busqué "Vante" en Google y sólo encontré fotos de tus pinturas.

—Todavía no quiero hacerlo porque probablemente tendría que tener más cuidado al salir. Aunque...cuando recién comenzaba tenía un número para hacer pedidos personalizados, deje de usarlo ya que por obvias razones los pedidos eran muchos. La mayoría dejó de llamar, sabían que no contestaría, además, solía dejar el celular apagado. Sucede que desde hace unas semanas un chico me llama casi todos los días pidiéndome una pintura para su novia, mencionando que pronto será su cumpleaños.

—¿Y qué piensas sobre eso?

—Tal vez le ayude, dice que ella es gran fan de lo que hago. Lo que más me asusta es la cantidad de dinero que ofrece.

—Si es así deberías aceptar, claro si no estás ocupado ahora—Estaba tan orgulloso de que sus amigos pudieran cumplir sus metas. No podía esperar a verse con Hoseok de nuevo y preguntarle más a detalle sobre su vida también.

—Si vuelve a llamar mañana lo citaré en mi taller—Lo único de lo que debía estar seguro era que no se tratara de algún tipo extraño que quisiera hacerle daño.

El rubio alentó a su amigo despeinado sus cabellos, a lo que su celular comenzó a sonar.

Era Eunwoo.

[...]

—Oye...no era necesario—Jimin notó como su contrario tenía cuatro bolsas llenas de comida y medicamento.

Lo dejó pasar sin comprender el porqué quería verlo con tanta urgencia.  

Para su mala suerte Taehyung tuvo que irse en cuanto colgó la llamada hace no más de media hora.

—Estás enfermo, te aseguro que esto te ayudara—Después de dejar todo sobre la mesa comenzó a sacarlo y acomodarlo en la cocina.

—Yo lo guardaré, te molestaste en traer todo esto hasta aquí—Fue tras él tomando las cosas que quedaban, metiendolas en el refrigerador.

Ambos estuvieron en un leve silencio durante unos minutos, hasta que Eunwoo se decidió a hablar otra vez.

—Sobre lo que quería decirte...espero no te moleste—Aceptaba que fue un impulso por sentir algún tipo de recelo hacia YoonGi.

—¿Por qué debería?

—En ese momento estaba tan molesto por lo que me contaste que dije algo que no debía.

—Espera—Se giró en su dirección, comenzaba a sentir una corazonada sobre ello—¿Paso algo malo?

—No exactamente. Sobre el trabajo todo se encuentra en orden, pero...era inevitable que me encontrara con YoonGi, él comenzó a preguntarme donde estabas...entonces le dije que sabía las cosas que te reclamo e invente que nosotros teníamos "algo" y que esa era una razón para que se alejara.

Jimin dejó caer algunas frituras que tenía entre sus manos, por lo que Eunwoo se acercó a levantarlas, no fue hasta que el más bajo pudo reaccionar y sólo así se acercó a ayudarlo.

—No se que decir sobre esto, porque sin duda va a malinterpretarse. No tengo buenos términos con él ahora, podría decirle a algún medio y hacer noticias falsas sobre nosotros.

—Tranquilo, no le conviene hacerlo. Ten en cuenta que sólo nosotros dos sabemos del trato que te ha dado.

—¿Y si...

—Jimin—Tomó sus hombros, y al encararlo pudo hacer que no hablara más—Con todo este asunto quiero hacerte una propuesta, mi afán es poder ayudarte. Estara aquí durante unos meses, si te sigue incomodando de esta forma nunca podrás trabajar en paz.

—¿Cuál es esa propuesta que dices?

—Que finjamos ser novios.

—¿Estás realmente seguro de esto? No quiero involucrarte más en mis problemas, ya fue demasiado con que te enfrentaras a YoonGi hoy.

—El estado en que nosotros estamos también afecta nuestra forma de trabajo, tu serie está en progreso, no puedes decaer ahora por sus comentarios. Míralo como una forma de escudarte.

Tuvo que pensarlo por un momento. Si lo veía desde otra perspectiva no era del todo malo, todos los puntos que le decía eran válidos. Al final se dio cuenta de que era la única opción que le quedaba, si terminaba negándose tendría más dolores de cabeza por culpa del pelimenta.

O bueno, no se había dado la oportunidad de hablarle de nuevo. De todas formas la primera impresión que le dio fue la peor.

Esperaba no arrepentirse de lo que estaba por decir.