Sugar Mommy -Ariana y T/N

03: Courtney

Llevamos como tres semanas teniendo encuentros sexuales con Ariana, y me compró un auto, un departamento y renovó todos mis aparatos electrónicos.

Me abrumaba pensar en todo el dinero que gasta en mí, pero de eso se trata nuestra "relación". Ella era muy dulce cuando hacía lo que ella quería, pero si no lo hacía, podía transformarme en una verdadera perra. Aunque aveces tenía comportamiento como una niña pequeña.

Hoy debía salir con Chloe, su amiga Courtney nos había invitado a una fiesta en su casa. No nos hicimos de rogar y aceptamos. Después de todo, no tenía que estresarme por mi trabajo en el local de comida rápida.

AG
Activo ahora

ven al hotel

no puedo ahora
debo salir con mi amiga

disculpa?
no te estoy preguntando sí puedes o no
es una orden
ven al hotel ahora

ya voy

Llamando a Chlo💐

–No voy a poder ir.

–¿!Qué? No! _____, vamos.

–Ar- la mujer que, ya sabes, me pidió ir ahora.

–Ay no. Vete entonces. Pero tendrás que darle un buen regalo a Court, hoy es su cumpleaños.

–Claro. Adiós.

Corté

[...]

–Oh mi puto Dios. ¡____!

Tenía a Ariana gimiendo mientras me montaba furiosamente. Llevaba dos orgasmos y no me había dejado venirme porque protesté antes de venir a verle.

–Arrodíllate en el suelo. Necesito de tu lengua.

Hice lo que me pidió mientras ella se sentaba en la orilla de la cama con las piernas abiertas.

–Quiero que con tu lengua traces círculos en mi clitoris.

–Yo... no sé dónde está.

Ariana se burló.

–Eres igual de tonta que los hombres. Está arriba, te vas a dar cuenta cuando lo toques y- Oh mierda, ahí. Justo ahí.

Comencé a mover mi lengua lo más rápido que pude. Ariana tomó mi cabello y enredó sus dedos en él empujando mi cabeza a su centro. Succioné su clitoris haciendo que ella llegue al climax, pero no me detuve, seguí con mis movimientos, y también jugué con mis dedos y su agujero.

–¡Oh! ¡_____! Eres tan perfecta.

Se deshizo en mi boca, y limpié toda su entrepierna con mi lengua.

–¿Dónde debes ir? –Me preguntó mientras se vestía.

–A la fiesta de una amiga. Pero era a las 8, y ya son las 9 –respondí mientras me levantaba.

–Oh cariño. Las fiestas duran mucho más. Ve. Pero primero deja que te ayude con eso.

Hablaba de mi entrepierna.