Angel Scarlata ..-CANCELADA-..

El nuevo Ángel

- puedo jugar con ella? - escuche decir una voz sencillamente dulce
- espera a que despierte y se lo preguntas si? - esta vez una voz un poco mayor era la que hablara
- y si resulta ser mala conmigo - la misma voz dulce de un pequeño
- ningún ángel es malo - respondió la mujer.
Poco a poco comencé a sentir nuevamente mi cuerpo tenía el control de mis piernas y manos, respire hondo y profundo y comencé a abrir los ojos
- mira ya comienza a despertar - chillo la pequeña

Al abrirlos lo primero que vi fueron unos grandes ojos expresivos de color fucsia <<oh! Qué raro>> y una enorme sonrisa infantil, todo enmarcado por unos rizos color bronce. Volví a respirar tal vez y en realidad no había muerto

- hola que bueno que despertaste - dijo la niña mirando me de cerca
- ho. Hola quién eres? - pregunte mientras me levantaba poco a poco
- jajá! Habla divertido mi nombre es Clara y tú? –
- Ju..July - respondí nerviosa
- Bienvenida July, déjame ayudarte - dijo una chica blanca con ojos verdes, una larga trenza sobre su hombro y detrás una melena naranja, vestida toda de blanco y me dio la mano para ayudarme a levantarme, al hacerlo note que me encontraba en una especie de salón con pilares de mármol que sostenían el techo en forma de.. Bueno la no sé qué forma tenia visto desde dentro, alrededor de la enorme pista blanca circular donde estaba parada había una enorme campo verde, lleno de árboles y flores de colores que ni sabían que existían.
- dónde estoy? - pregunte mirando a todos lados
- este sitio tiene el nombre que desees ponerle, la verdad eso aquí no tiene importancia solo le decimos hogar - explico ella
- valla, entonces si estoy muerta - dije, pero me sentía tan viva que la verdad era que ni me lo creía
- no, claro que no, solo que ahora vivirás como un ángel - explico nuevamente, ángel?
Estaba tan fascinada con todo lo que me rodeaba que no había notado las alas blancas que tenían en la espaldas ella y clara
- entonces soy un ángel, pero no estoy muerta? - trate de entender
- los ángeles no morimos, solo somos llamados los muertos quedan deambulando por el mundo o van al cielo.. - hizo una pausa como si de pronto hubiera recordado algo - y antes de que lo preguntes tampoco fuimos seres divinos que ilustran en la religión, ellos son los servidores de Dios, nosotros solo tomamos su nombre por nuestro parecido a esas imágenes aladas - termino explicando
- ya veo y nosotros de que nos encargamos? –
- de proteger el mundo de los seres oscuros, si uno de nosotros tiene malas intenciones va perdiendo sus plumas y se convierte en un ser sombrío...- explico la chica nuevamente - ah con todo esta charla olvide presentar me mi nombre es Evangeline, yo me encargo de guiarlos a todos - aclaro con una suave sonrisa
- y yo me encargo de buscarlas y traerlos sanos y salvos, como a ti - dijo clara

A todas estas había algo que no sabía aun, entre mi brazo hacia mi espalda hasta que mis desde sintieran un cosquilleo suave como de hilos de seda, me acerque a una fuente que había cerca y mire mi reflejo y hay estaban mis alas grandes y tan negras como el carbón.

- son negras - aclare mirando mi reflejo

- en un tiempo se volverán blancas todos comenzamos así - dijo Eva restándole importancia.

Como notaran Evangeline era la típica llena de sabiduría que se espera encontrar en las novelas de fantasía, la verdad es que aún no creía que esto en verdad estuviera pasando, y al partirme solo me hubiera golpeado la cabeza y justo ahora estuviera en el hospital sonando, algo aturdida por el suero <<si, quizás solo sea eso>>pensé mientras clara me guiaba a mi nueva casa en ese lugar.

- bien, aquí es - dijo al llegar a una pintoresca cabañita con una puerta y una sola ventana, clara me entrego una llavecita dorada con lo que abrí la puerta, el interior era lo suficientemente grande para mí y había una cama perfecta para que un ángel con sus alas durmiera cómodamente y closet en la esquina, una mesa y una silla.
- no hay baño, ni cocina? –
- el baño se encuentra allí atrás, y todos comemos juntos en el gran comedor - explico - aquí está tu ropa, creo que te gustar cambiarte esa pijama - añadió señalando el guarda ropa
- acaso solo visten de blanco? - pregunte al ver dentro del guarda ropa
- July, es que somos ángeles - respondió Clara divertida, saque unos jeans de tela suave hasta las rodillas, una blusa de tirantes larga hasta debajo de las caderas y unas bailarinas (obvio todo blanco) y mientras me limpiaba la cara decidí preguntar
- Clara, que haces aquí? Pareces ser la más joven –
- la verdad es que no, aquí hay más chicos pequeños que yo al igual que ancianos y claro jóvenes como tú - dijo sentada desde la mesa mientras movía sus pies de adelante hacia atrás.
- Mmmm.. Y, a donde iremos? - pregunte ya lista
- al comedor claro, todos quieren conocerte –
- bien entonces, no los hagamos esperar -Íbamos caminando, y hablando cuando pronto una chica paso volando velozmente sobre mi cabeza, me miro queriendo presumir algo quizás su destreza al volar o su apariencia ya que era en verdad linda, con la piel clara y el cabello negro las que supuse llegaba hasta sus rodillas sonrió odiosamente y siguió su camino
- quien era esa? - pregunte mirando aun hacia la dirección donde había perdido de vista a la chica
- es solo Helen - respondió Clara haciendo una mueca.

Caminamos hasta el comedor que era enorme, había muchísimas mesas y demasiados grupos de ángeles comiendo en grupos, habían blancos y negros con alas blancas y negras, parecía un comedor de secundaria, en cuanto entre todos (y en realidad todos) pusieron su mirada sobre mí, me sentía incomoda y asustada, y en cuanto voltee Clara había corrido a reunirse con sus amiguitos. Camine lentamente buscando una mesa vacía, todos volvieron a lo suyo pase junto a la mesa donde estaba esa chica Helen y su grupo, quienes me lanzaron una mirada de "mejor sigue no entras aquí" distraída choque con algo y de pronto me vi perdida en un mar de plumas, me aleje y note que eran unas alas negras en la base y blancas desde la mitad hasta la punta

- lo.. Lo siento mucho - dije nerviosa-no hay cuidado - dijo el chico, de cabello castaño y ojos grises, de piel clara pero algo tostada - July cierto? – pregunto
- Oh por dios! Thomas, que poca clase temes, invítala a sentarse con nosotros - chillo una vocecita chillona, detrás del salió una chica rubia y pecosa, su cara parecía la de una niña de 10 años pero a simple vista se notaba que no lo era
- hola mi nombre es Teresa, ven siéntate - Ella me acompaño hasta su mesa y ahí estaban sentados otro chico que leía algo por lo que no pude verle el rostro y una chica de piel color chocolate, Thomas se sentó a mi lado y teresa a su lado
- hola mi nombre es Phoebe - saludo la chica, el chico bajo el libro y al verlo me sorprendí, voltee a ver a Thomas para confirmar que no se había cambiado de lugar, pero allí estada
- mi nombre es Taylor - saludo el chico del libro <<oh! Son gemelos>> pensé con obviedad
- oye July, que tal tu primer día? - pregunto Teresa
- bien pues anormal, creo, aun no entiendo mucho de esto y muero de hambre - conteste con una sonrisa
- eso es normal, toma comete esta mandarina - dijo Thomas ofreciéndome una increíble fruta con un exquisito aroma 
- no la quieres? –
- Nah, las aborrezco - conteste alejando educadamente la Naranja

Al terminar de comer todos 4 me acompañaron a mi casita, la noche se veía asombrosa con tantas estrellas llegue a mi nueva casa, hablamos por un rato y luego ellos se fueron. Me acosté preguntándome como estaría mi madre, me extrañaría? Y mi padre? Como habría reaccionado al oír sobre mi desaparición, pensé en ellos deseándome las buenas noches como cuando era pequeña y en un instante me dormí... Claramente no estaba sonando