Hermanos

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-Colin podemos hablar- le dijo Helen mientras servía el desayuno. 

-Tal vez después- le contesto –Voy a llevar a Evan a casa de mis padres- 

-Lo voy a llevar al almuerzo con mis amigas- 

-No te estaba pidiendo  permiso, dije que lo iba a hacer- le respondió de forma hiriente, se levantó y se fue de la cocina sin desayunar.

  Colin subió a su habitación y optó por unos jeans oscuros, sus zapatillas azules que le había regalado Jennifer y una remera blanca, se dirigió al cuarto de su hijo donde aún dormida y con una voz suave lo despertó. El niño somnoliento se vistió con ayuda de su padre y juntos salieron hacía casa de los padres de Colin, pararon en un Starbucks a desayunar donde Colin pidió un latte grande y leche caliente en un vaso pequeño para su hijo, sin dudas añoraba las donas del dunkin donouts que compraban con Jennifer en las mañanas. 

 Al llegar a la casa de los abuelos de Evan, también padres de Colin los recibieron con mucha alegría a su hijo que hacían meses no lo veían. Su nieto amaba aquella casa que era mucho más grande que en la que vivía con un gran patio, además tenían tres perros que adoraban a Evan. 

 -Qué extraño que no vino Helen con ustedes- le dijo su madre.

-Tenía que almorzar con sus amigas- le contesto Colin.

-Queres algo de tomar?- le pregunto su padre. 

-No, acabamos de desayunar- le dijo haciendo referencia a Evan también mientras lo observaba corriendo por el gran jardín verde junto a los perros.

-Hace mucho no veíamos a Evan- le comento su padre.

-De verdad?- preguntó Colin incrédulo. 

-Helen no lo trae muy seguido, seguro porque ha estado ocupada- le dijo su madre inocentemente. 

 Ya para el horario del mediodía su hermano Travis había llegado del trabajo al ver a su hermano mayor se alegró mucho, a pesar de se comunicaban por Skype verlo de nuevo de persona merecía un gran abrazo.

-Hey! Travs- dijo Colin al ver que su hermano subía las escaleras rumbo a su cuarto -Podemos hablar?-

-Claro hermanito- dijo Travis mientras descendía de dicha escalera -Dime...- volvió a hablar quedando frente a frente con su hermano, Colin lo guio hacia patio  trasero donde podía vigilar de Evan que aún continuaba jugando allí. Él bebe no se había cansado de jugar, era increíble como el humor le cambiaba al estar en esa casa.

-Estoy enamorado- esbozo Colin sin más, escupiéndolo.

-No me digas.... desde el secundario decís que estás enamorado de Helen- le contesto con sarcasmo.                              

-De alguien más...- lo dijo casi en un susurro pero aun audible para su hermano

-De que estas hablando?- le pregunto sorprendido.

-De que hace tiempo ya no siento lo mismo por Helen, incluso desde antes que naciera Evan- con cada palabra que decía parecía que se estuviera sacando un peso de encima. Porque nunca fue capaz de pronunciar aquello en voz alta?

Gotta run from thisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora