Vida nueva

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Eso era todo lo que necesitaba, tomó su computadora y adelantó su pasaje al primer vuelo con destino Los Ángeles. Alguien necesitaba ponerle fin de una vez y ese alguien era ella, de nuevo.

El reloj marcaba las seis menos diez de la tarde, Colin se excusó de Helen con que iría a correr y se fue a sentar en la recepción donde esperaría que bajara Jennifer. Los minutos pasaron hasta que fue mas de la hora acordada y ella no llegaba.

-La señorita Morrison ha salido?- Pregunto en recepción.

-Realizo el check-out antes del desayuno- Le respondió una mujer que estaba sentada atrás de una computadora.

-Como?- sin pensar, hablo en voz alta.

-Usted es el señor Jones?- Pregunto.

"Jones" pensó Colin, su personaje... Jennifer solía decirlo como "nombre clave" -Si, soy yo- respondió automáticamente.

-Dejo esto para usted- y saco una bolsa de abajo del escritorio.

-Gracias- Colin se dirigió hacia donde había estado sentado hacia unos minutos.

Abrió la bolsa y encontró la gorra negra que le había entregado el día anterior, había un nota en el ella.

"Nos vemos en Vancouver -J."

La perdía una vez más, Colin volvió a su habitación donde espero que su hijo se durmiera y le hizo el amor a su mujer una y otra vez hasta que el sueño lo venció, un clavo sacaba a otro clavo. Quería sacársela de la cabeza, con cada recuerdo se enojaba y su enojo lo descargaba sobre Helen, quería arrancarla de su corazón hasta odiarla y odiarla hasta olvidarla.

Mientras tanto en algún lugar sobre el atlántico, Jennifer tenia la mirada fija su libro que no había superado la primera pagina que había empezado a leer desde que el avión había despegado.

Dicen que hay vivencias que aunque parezcan insignificantes te marcan a fuego, lo de ella con Colin no podia ser y lo tuvo claro desde el primer momento pero como se engaña al corazón cuando lo que siente es tan autentico y verdadero.

Tomo su iPad y redacto lo que le dictaba el corazón, el aviso de su ultima temporada de la serie que la hizo vivir al limite.

"Querido Adam, cómo estas? Acabo de volver de unas vacaciones de lujo con algunos percances sin importancia, no se si es la mejor manera de decirlo pero quiero ser directa e informarte que probablemente esta sea mi ultima temporada con el proyecto. No se que deparara mi destino pero espero que nos veamos pronto así te soy mas clara, saludos Jennifer."

-Flashblack-

Jennifer miraba Netflix desde su computadora, una película de trama fácil que la hizo olvidarse del pésimo que había tenido, las migrañas la ponían de pésimo humor y el mejor remedio que encontró para que le entre el sueño era ver una película hasta que una notificación en la parte superior derecha de la pantalla la saco de su poca concentración.

"Colin O'Donoghue te ha enviado un mail"

-Colin?- pregunto mientras esperaba que cargue la pagina.

"Hey Jen! Encontre el cd del que hablamos hoy, mañana te lo llevo. Saludos Colin."

Al leerlo esbozo una sonrisa tonta y comenzó a tipear automáticamente una respuesta.

"Jajaja Genio! Gracias, besos."

Jennifer mientras esperaba alguna respuesta volvió a leer su mensaje -"Gracias, besos" Quien te enseña a contestar un mensaje Jennifer- decía indignada.

La respuesta llego antes de lo que se imagino.

"Todavia despierta?"

Ambos tenían aquella sonrisa tonta en sus rostros.

Hablaron vía mail hasta la madrugada, ninguno quería dejar de escribir. Colin se vio obligado hacerlo ya que se quedo dormido con el celular en la mano.

-Fin del flashback-

Guardo su iPad y se recosto en su asiento esperando dormirse en algún momento.

Al otro día, Colin durmió hasta el mediodía que Helen lo despertó con la idea de que fueran a la playa. Lo que sea con tal de no pensar se dijo así mismo. 

No sabia lo que era el dolor hasta que pensaba en ella, dice que la medida del dolor es el amor y no hay dudas que mientras mas amas más grande es el dolor. Cómo hacer para arrancarla de cada cosa, de cada pensamiento?

Fue un día agradable, soleado, jugo con su hijo hasta el cansancio, se divirtió con su esposa como hacía mucho no lo hacía. No todos los días uno tiene la oportunidad de empezar una vida nueva, sin preocupaciones, una vida relajada, sin riesgos, una vida sin soledad y para eso hace falta decir adiós. A veces hay que rendirse de una vez y aceptarlo, la vida es hermosa y cada día empieza una vida nueva.

Gotta run from thisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora