Wattpad, pero más piola.

La típica de la nerd y el malote.

Una vez más, aclaro que no busco ofender a nadie porque no tengo nada en contra de este tipo de historias, hasta a veces si las encuentro por ahí y me llaman la atención, me las leo. Y no salto porque sienta que voy a ofender a alguien, lo digo porque sé que toco temas polemicos y la gente llega a ser algo "sensible" con eso. Así que por favor no se anden enojando que esto es mi pura babosada del aburrimiento y para el entretenimiento. Muacks, los adoro zhukitas JAJJAJAAJ.

Momento narrativo medio comentarista:

Hola, mi nombre es Feria (Flashe nombre que nada que ver) y tengo diecisiete años. Nací en... (blah, me da fiaca escribir toda la boludez e inventarme todo eso así que ustedes piensenlo).

Soy normal, por debajo del promedio. Ya saben, ojos azules, pelo rubio, re fachera y con un gran cuerpo oculto debajo de ropa holgada, pero nadie me da bola porque soy la nerd de la secundaria.

(Insertar foto de Barbara Palvin, de una boludo)

En la escuela todos están separados por grupos. (Ya sabemos cuales son esos grupos)

Pero sin duda, el peor de ellos es el de los populares (Ludmila de Violetta un poroto).

En ese grupo se encuentra Peduro (Es pelo duro mezclado entre sí, alta fiaca buscar un nombre). Es sexy, se ratea de la escuela, tiene tatuajes, es re tincho y anda con campera de cuero (Porque no sé, el chabón se creé Iván De Pineda, o no sé, ni le llega a los talones).

Es el chico más popular de la escuela, y claro que para él soy una total desconocida, o sea... Soy solo yo (Es solo una super modelo, o sea Duh).

Camino por los pasillos de la escuela acomodando mi pelo detrás de mi oreja (JAJAJA, RE CARA DE RADIO REBEL LA LOCA, ALTO MIEDO).

Entonces su cuerpo golpea con el mío y mis libros (De setecientas páginas) de astronomía y biología se esparcen por todo el pasillo.

—Hey, tené cuidado cuatro ojos. —habla el tipo frente a mí. (¿Cuatro ojos flaco? Para, visión biónica)

—Yo... Perdón. —murmuro avergonzada. (Lpm, tirale los libros por la cabeza. ¡Amiga, por favor defendete!).

(Vamos a cambiarlo ligeramente...)

Saco una metralleta de mi mochila y le empiezo a tirar corchazos por el cuerpo, pero él saca sus poderes arácnidos y salta por las paredes esquivando mis balas.

(Nah, demasiado exagerado. Mejor dejémoslo en que es la nerd linda que tiene caracter.)

(Revovinando, revovinando, revovinando, revovinando.)

(Alto.)

—Hey, tené cuidado cuatro ojos. (Ahora sí.)

—¿Perdón? —pregunto frunciendo mis cejas desconcertada.

—Pensaré en perdonarte. —suelta con egocentrismo. Sus amigos ríen a su espalda apoyandolo (El grupo de boludos nunca falta. Siempre son esos que juegan al futbolito y son de los popus, ya sabemos, que se yo).

—Fuiste vos el que me golpeo. —elevo una ceja abriendo mis brazos ligeramente. (Este atrevimiento me gusta, uh).

—No podes culparme por... —me observa de arriba a abajo con desdén poniendo sus manos en sus pantalones de jeans rotos-, pasarte de alto. (Agarrenme que lo mato, ya, de una.)

—Sos un pelotudo. —(Que nunca te falte el acento pa.) niego con frustración y suspiro bajando a buscar mis libros. (Blda, te amo, encima te llamas Feria, sos perfecta JAJAJAJAJ.)

—¿Qué dijiste? —pregunta en un tono elevando dando unos pasos a mí,

—Y también sordo. —me apresuro a levantarme para enfrentarlo ya con mis libros en mano. (EAH, CAPAAAA, ÍDOLAAAAA.)

Paso por su lado chocando su hombro y escucho a sus amigos bullir a su alrededor (O sea tipo: Uhhh, o, ohh lo que le dijoooo. Re hdp), junto a todos los estudiantes que miraban la escena con interés. (Unos chusmas del tuje.)

—Hey, hey, hey, ¿a dónde crees que vas? —insiste agarrando mi brazo volteandome para verlo.

—A mi clase, al menos mi cerebro si comprende mis responsabilidades básicas a diferencia de otras personas groseras que malgastan su tiempo en boludez e insultan a la gente hasta humillarla sin pedir una disculpa. —me suelto brusca de su agarre y escucho los silbidos de las personas mientras me alejo.

Momento comentarista:

Una capa.

Y acá todos sabemos que pasa, al chabón cómo que le re pone que la mina lo trate mal y como el masoquista que es decide buscarla. Ella lo rechaza, él le coquetea, ambos se meten en ese juego raro de: Sí, no, no sé, te quiero pero no te quiero.

Y ambos están en eso de que "Es mi primera vez en algo así", "Nunca tuve nada serio".

Entonces ella está cómo: "No quieeo nada con vos", "Sos un boludo", y la posta tiene toda la razón, "Estás emcaprichado con tenerme y en realidad no sentís nada por mí".

Y él cómo: "Posta que sos la única que quiero", "Sé que soy un mujeriego pero por vos cambié", "Tal vez bese a esa chica en esa fiesta cuando eramos novios pero habíamos peleado y estaba borracho". Re que nada que ver boludo, alto descarado.

Y se pelean, se separan, él que está re loco por ella y re cambio la va a buscar pero como que ella se hace la difícil porque es Bárbara Palvin y puede, o sea, déjate de joder, obvio que puede.

Después como que se reconcilian, vuelven a estar juntos y ahí tenemos a dos tipos de escritores:

Los hermosos que te dan ese epílogo con la boda.

Y los forros que te los separan a último momento, y después te hacen un reencuentro de mil años, o hasta los muy malditos te los matan.

Posta, ¿con qué necesidad? Mi corazón no tiene la suficiente estabilidad emocional, lloro fácil con ese tipo de cosas, ¡tengan compasión, loco!

Y boe, te la bancas, porque aunque terminé bien no superas tener que dejar a ir esos hermosos personajes, sean como sean y con las personalidades que tengan. O sea cual sea su final, no lo vas a poder superar.

Y así termina este primer estilo de la típica historia de una inteligente y un malote.

O sea... Una cheta y un wachiturro.

Nada que ver que me acordé de las culisueltas y el tremendo remix que se mandaron en un recital, lo tienen que escuchar.

¡Pienso, pienso, pienso, en ti, en ti! Naaa, re cheto.