Pillowtalk (2Won)

Un Lugar Donde De Sienten Las Lágrimas, Un Lugar Para Perder Tus Miedos

Único

¿Como había llegado a esto?

Había perdido la cuenta de cuantas veces se ha preguntado lo mismo, todas y cada una de ellas, lo han llevado a recordar los sucesos de los últimos dos años de su vida.
Le sorprendia como esta había cambiado tanto en ese poco tiempo, pasó de estar comprometido con su novio de la adolescencia, a estar en la cama de un desconocido; si alguien le hubiera dicho que eso pasaría, por supuesto que se habría reído como nunca y después tachado de loca a esa persona. ¿Como el iba a dejar su vida aburrida y monótona, para embarcarse en esa extraña relación con un (en ese entonces) desconocido?.

Sus pensamientos se vieron interrumpidos por el dolor en su entrada, mordió con más fuerza la almohada debajo de el, al sentir como el miembro del mayor se abría paso en su interior, dejó que pequeñas lágrimas se escaparan de sus ojos y soltó un gemido cuando el otro entró por completo; después de unos minutos lo sintió moverse en lentas embestidas que poco a poco se volvieron rápidas y arrancaban fuertes gemidos de su garganta, escondió su rostro en la almohada cuando sintió que su próstata fue golpeada de una manera muy placentera, no quería gritar y que los vecinos se molestaran como veces anteriores, sabía que el contrario lo hacía a propósito precisamente por eso; pero el no podía pensar en otra cosa que no fuera la manera en que se encontraba siendo penetrado, los vecinos podían irse al diablo hasta que el se corriera, y hablando de eso, sintió como su vientre se contrajo anunciando su tan esperado orgasmo, que fue acompañado por el del mayor en su interior, cuando este salió de el, se acostó aún lado suyo y el se acercó a su cuerpo para recostar su cabeza en el pecho ajeno, cerró sus ojos y dejó que el sueño lo venciera.

Abre sus ojos lentamente, sube su mirada y observa que su mayor sigue durmiendo, sin poder evitarlo una sonrisa se le escapa, no lo admitiría en voz alta, pero amaba despertar a su lado, suspira antes de levantarse de la cama y se dirige al baño para asearse. Después de desayunar junto a Lee, se dirigió a su departamento y en el camino volvió a recordar todo lo que ha pasado en su vida hasta este momento.

Hace dos años atrás, el estaba planeando su boda, aunque para sus amigos estaba muy joven para casarse, para el estaba bien, pues hasta ese entonces creía que esa era su vida, casarse y trabajar. Wu Yi Fan, era su prometido, un hombre muy guapo, inteligente, educado, elegante, con clase, un hombre de mundo, todo un caballero; el unico pequeño gran detalle que tenía, y que para HyungWon se volvió difícil de ignorar, fue que era un aburrido. No lo decía solo porque siempre tenía cara de que haber chupado un limón, en verdad era muy serio, los años que estuvieron saliendo solo unas pocas veces se mostró bromista, incluso en la intimidad era aburrido, nunca salieron de su zona de confort, al principio no tuvo problema con eso, ya que en si, su vida era aburrida y monótona, pero luego de escuchar las experiencias de sus amigos y reflexionar sobre el curso que su vida llevaba, se decidió a hacer un cambio. Después de pensarlo durante dos semanas, habló con Yi Fan y terminó su relación, afortunadamente Wu pensaba igual que el y tampoco le veía futuro a lo suyo, quedaron en buenos términos y hasta la fecha son muy buenos amigos; a eso le siguió un cambio de look y de hábitos, pues aunque no salía diario, si iba de vez en cuando a antros, cosa que antes no hacía ni aunque le pagaran, todo eso asesorado por los expertos en moda y fiestas, Lee MinHyuk y Byun BaekHyun sus dos mejores amigos. Un año después del cambio en su vida, se encontró a quien se había convertido en el mejor error que pudo cometer, un lobo con piel de oveja, la tentación en persona que tenía nombre y apellido Lee HoSeok o como se presentó con el esa noche, Wonho. Lo había conocido en un antro qué se había vuelto su favorito, como todos los sábados sin falta el y sus amigos acudieron ahí, bailaron y tomaron hasta más no poder; en un momento de la noche HyungWon se dirigió al baño, justo cuando lavaba sus manos entró un hombre que parecía sacado de esas historias juveniles, guapo, musculoso, alto, no tanto como el, pero lo era, vestía con pantalón y chamarra de cuero, una playera blanca y unos botines negros, parecía el típico chico rudo de las películas y novelas; se miraron unos segundos, antes de que terminara de secar sus manos, y cuando avanzaba hacia la salida, fue tomado del brazo por el otro hombre, quien estampó su cara contra la pared, pego su cuerpo al suyo restregando su hombria en su trasero, se acercó a su oído y habló cerca de este haciendo qué su piel se erizara.