El Chico Del Sombrero (Camilo Madrigal X Male Reader)

06.

Conducta homosexual.

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Habían pasado unos cinco días desde la reaparición la casa Madrigal, la nueva presencia de Bruno no afecto nada en mi desempeño, yo seguí trabajando con ellos, y me volvía un poco más cercano a la familia, le agarré más confianza a Camilo al cual ahora le digo con seguridad "wey".

-hola ___-

-Hola, Dolores, ¿cómo le va? ¿Qué tal las cosas con Mariano?- le pregunté sin dejar de hacer mi trabajo

-Todo bien, oye ¿Has visto a Camilo?- hablo Dolores mientras yo arreglaba la máquina para triturar

-No lo he visto, a de estar por ahí atragantándose con una arepa o algo, pero si lo veo le diré que lo estás buscando-

-si gracias, y... quería saber, que piensas de mi asombroso hermano?, con eso de que últimamente pasan mucho tiempo juntos-

-pues... no es una mala persona, es gracioso y todo eso, y estoy feliz de que me considere su amigo, de verdad-

-se te hace atractivo?-

Al escuchar eso me puse un poco nervioso

-pue- pues feo no es, para qué te miento Dolores, es... simpático, ya sabe, además canta bien tiene linda voz y...- me detuve al ver a Dolores enfrente de mí cuando se supone que la tenía detrás -si tú eres Dolores entonces quien?-

-así que tengo bonita voz eh?- dijo Camilo dejando atrás la forma de Dolores

-hijo de...- dije aventándole uno de los guantes de protección que llevaba puesto, pero él lo esquivo.

-jajaj no te enojes pues-

-Camilo la abuela te necesita- dijo Dolores con una sonrisa tras el escenario de ambos jóvenes.

-ya voy, te veo luego, espero y no extrañes mi voz- dijo devolviéndome el guante que yo recibí de mala gana.

Mientras Camilo se alejaba Dolores se acercó a mí.

-ya no te intimida tanto como antes por lo que veo-

-Bueno cuando te llevas con él es difícil tomarlo enserió-

-Me alegra que sean amigos, te digo algo, de lo único que habla es de ti en la cena, siempre que le preguntan como estuvo su día dice "___ y yo hicimos esto, fuimos a tal lugar, hablamos de esto" te volviste parte de sus aventuras-

Yo sonreí con un leve rubor al escuchar esto.

-Con esa personalidad es fácil tenerle paciencia, él alguien simple e interesante con el cual lidiar-

-Me alegra que se lleven bien-

-sí... yo también-

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Al terminar de trabajar llegué a casa no para descansar sino para arreglar sus "pequeños" detalles, después de trabar durante unas cuantas horas en mi hogar me fui a dormir, sin embargo sentía un leve dolor de cabeza aunque era algo tolerable así que en realidad lo pasé por alto.

-nmms mañana me pongo un colchón, bueno de todos modos hoy me adelante a mis tareas, así que saldré mañana temprano del trabajo, ¿no es genial pepe?- este solo dormía -por eso el perro es el mejor amigo del hombre-

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Al día siguiente todos los madrigal desayunaban con tranquilidad, cuando aquel joven que trabajaba para ellos llegó con mucho que desear, la nariz irritada al igual que sus ojos, ojeras y parece que ni fue capaz de peinarse.