no me dejes ❪ mini au ❫

3

Él error de yoongi fue creer que su esposo no se enteraría.

Él error de yoongi fue traicionar a su esposo siéndole infiel.

Pero tarde o temprano pagaría las consecuencias de sus actos, y lastima que yoongi lo pagaría de la peor forma.

Si tal vez antes de acostarse con aquel chico hubiera pensado en su esposo y el pequeño bebé que este llevaba en el vientre, sus dos angelitos estarían con él.

Lamentablemente se dio cuenta demasiado tarde.

Ese día no esperaba que su esposo llegara a su trabajo, tampoco que entrará a su oficina sin tocar.

Taehyung solo quería llevarle el desayuno a su esposo, pues sabía que este a veces se mal pasaba y eso le haría daño, pero no pensó en encontrarse con aquella escena que le desgarraria el corazón.

Él menor había salido corriendo, y yoongi fue tras él después de terminar de vestirse, sin embargo su pequeño esposo ya no estaba en la empresa, sin pensarlo subió a su auto y conducio hasta su casa.

Al llegar, subió rápido las escaleras, hacia la segunda planta donde compartía habitación con el castaño, no estaba ahí, hasta que escucho un golpe en seco provenir del baño, corrió e intento abrir pero la puerta tenía seguro.

— ¡Taehyung! ¡Taehyung abre la puerta!

Mientras tanto, taehyung había caído al piso al borde de la inconsciencia, mientras sentía un líquido bajar por sus piernas, llevo su mano ahí, sangre, lo que bajaba por sus piernas era sangre.

— gigi...

— ¡Mi amor, abre la puerta por favor!

Los gritos de yoongi cada vez se escuchaban más lejos.

Miro hacia la puerta con su vista cansada y sus párpados cerrándose.

Y en un abrir y cerrar de ojos, yoongi había roto la manija de la puerta logrando abrirla.

— ¡Taehyung!

Taehyung sintió su cuerpo ser tomado entre los brazos de su esposo, pero no sentía fuerzas para moverse.

— Mi niño, perdón, perdóname

Suplicaba yoongi entre lágrimas mientras abrazaba el cuerpo del menor con delicadeza.

Yoongi se sintió peor cuando miró a los ojos a su esposo y vio miedo reflejado en ellos.

— gigi... nuestra bebé...

susurró bajito, de repente, no sintió dolor, todo se volvió oscuro para él, lo último que escucho fueron los gritos de su pareja.

— No, no, no, taehyung no cierres tus ojitos, abrelos por favor, no puedes irte, aún te necesito.

Tomó a su esposo entre brazos para llevarlo a su carro, donde lo puso en el asiento del copiloto y aseguró el frágil cuerpo de el castañito con el cinturón.

Después de subirse arranco el vehículo y conducio lo más rápido que podía al hospital más cercano.

Al llegar bajo con su chico en brazos mientras gritaba por ayuda, una enfermera al ver esto lo auxilio con ayuda de otros enfermeros y doctores.

Él cuerpo del chico que ama se le fue arrebatado de sus brazos para ponerlo en una camilla, se acercó y tomó su mano, sintió el pulso débil, entre lágrimas le suplicaba a su esposo que resistiera, que no podía dejarlo porque aun lo necesitaba, y era así, sin taehyung él estaría perdido.

Horas habían pasado, él hermano y los amigos de su esposo como los de el habían llegado, Seokjin no había parado de llorar siendo consolado por su novio Jungkook, mientras tanto, Jimin, él mejor amigo de taehyung, estaba igual que él o peor, el peli rosa se había aislado de todos en uno de los asientos mientras lloraba.