The Sands of Time [HunHan]

Parte I

Caminé unas tres cuadras sin saber exactamente en qué dirección me dirigía, sólo sabía que Luhan no contestaba mis llamadas, pero... ¿Por qué? Se supone que hoy iba a decirle lo que el exactamente sabía a través de mis actos.

¿Debería ir a su casa? No podía, su padre no era muy amistoso conmigo. Sí... ¿Iba en donde él solía quedarse? No, con Jongin tampoco me llevaba bien.

El frío de la noche estaba inquietándome y por la escases de las personas caminar por las calles, noté que se estaba haciendo tarde. Mañana debía retomar mi trabajo, hasta hoy eran mis vacaciones.

Seguí llamando a su número de celular, pero me cortaban las llamadas ¿Por qué? ¿Por qué no hablar conmigo? ¿Habré hecho algo? Podía sentir el viento detenerse al pasarme por un lado. Las farolas de esa noche, extrañamente titilaban ¿A qué se debía eso? ¿A caso se aproximaba un mal tiempo?

¿Qué tenían que ver las farolas con el mal tiempo?

El mal tiempo se aproximaba a cada segundo que pasaba mientras Luhan no contestaba mis llamadas. 'Estará ocupado con sus diseños' fue lo que se me vino en mente.

La hora estaba pasando demasiado lento, podía presenciar que el reloj de arena dejaba de funcionar en mi mente. 'Tic-tac' del reloj de la sala de mi casa fueron mortales mientras vestía para encontrarme con la persona que, en pocas palabras; lo amaba.

Devolví mi paso. Volviendo a encontrarme con lo que, hacía minutos ya había pasado. Un gato negro salió de un callejón, sus ojos amarillos me observaron fijamente, sin piedad.

¿Acaso se está asomando la tormenta?

Levanté mi mirada, una simple mirada felina estaba inquietándome, alterando mis cinco sentidos... Mis manos se refugiaron en la chaqueta. Mi mentón se cubría con la bufanda azul que llevaba 'un regalo de Luhan'. ¿Qué más tenía de Luhan encima? El collar que me regaló hacía siete años de haberme graduado en la universidad.

– Tutor... ¿Qué hace en plena noche helada sin compañía? – la voz me sonó muy conocida. Unos de mis estudiantes de clases.

– Cyan, es un gusto verte en esta fría noche ¿Cómo vas con tu tesis?

– Excelente profesor, ¿No crees qué está haciendo mucho frío?

– Pero se sienta bien... – miré todo lo que me estaba rodeando, excepto a mi estudiante. Noté que una pareja salió de una cafetería

– ¡Cyan! – Gritaron – ¡Ésta jodida noche está helada!

– ¡Te congelaras ahí parada! – gritó otra persona.

– Profesor, ¿Quieres acompañarnos? – me preguntó nerviosa.

– Y... ¿arruinar su momento juvenil? Dejémoslo para otro día – comenté sin darle importancia al asunto, sin prestarle atención a aquella pareja que no dejaban de agitar los brazos.

Las palabras se me estaban acabando. ¿Debía llorar frente a ella? ¿Por qué tenía un presentimiento tan negativo? 'Corre Sehun, cuando ya no puedas más' su voz sonó tan real que llevé mis ojos a descansar, cerrándolos por un segundo. Sentí la mano de Cyan golpearme suavemente por la espalda susurrando un ligero 'Cuídate y ánimos, profesor'. Sólo opté por sonreír sin aún, abrir los ojos.

El maullido del gato me devolvió a la realidad, de que Luhan no contestaba mis llamadas.

Debía dar todo por perdido, porque mis pies comenzaron a caminar y mi mente solo pensaba en el bar. Donde terminan todos con el corazón arrastrado.

Y ahí, en ese bar de los despechados me encontré con lo que tantas veces daba por perdido. Luhan, sentado cómodamente en la barra hablando sonrientemente con un colega... 'Colega' La mano de aquel colega faltó a la clase donde dictaban 'la educación y respeto hacia otra persona' Mi corazón hirvió consumiendo todo el frío que había cogido fuera.