Sombríos Secretos

capitulo 24

Narra Samanta

Más despacio – escucho como se queja

No te quejes que esto no es nada – le respondo

Mierda, duele – está a punto de llorar

Te cansaste – le digo a mi hermano

Solo suéltame o me romperás el brazo – me dice

Bien – lo suelto – le quitas lo divertido a la vida

Vete a la mierda – me dice desde el suelo

Uy pobre él bebe – me burlo – ya se muere

Que te den Sam – me responde levantándose

Ya, ya deja de llorar – le digo

Me siento en el ring y me dedico a tomar agua, en eso veo que Eliot se acerca

¿Dónde aprendiste a pelear así? – me pregunta

Información clasificada – le respondo

Vamos, pensé que era su hombre de confianza – me dice haciendo una mueca de dolor

Tú mismo lo dijiste "pensaste" – le digo – no lo eres

Veo como otro hombre se le acerca y le dice algo

Su madre la llama – me dice

Verdad ¿Cuándo tendré un teléfono? – le pregunto – llevo más de 6 meses en España creo y no tengo uno

Aún no están listo – me responde

Que tanto le hacen – me quejo – es solo un teléfono

Estamos haciendo una historia para usted – me dice y ahí caigo en cuenta

Bien – suelto un suspiro

Narra Eliot

Veo como la señorita se para y sale del ring junto con su hermano

¿Pasa algo Eliot? – me dice mi padre

Porque lo preguntas – le digo

Porque no dejas de mirar a la señorita – me responde

Viste su manera de pelear – le digo

Sí, me recuerda a tu estilo de pelea – me responde

Exacto – le digo – ese estilo de pelea solo se lo enseñaba a los "elegidos" de "el jefe"

No creo que ella sea una de sus elegidos – me responde

No es eso – lo miro – la manera en como agarro a su hermano, era una técnica especial – miro a la señorita – es una técnica de matar y la única que pudo imitar esa técnica fue White Rose

Hijo – pone su mano en mi hombro – está delirando, ella murió hace años "el jefe" lo dijo

Si, supongo que si – veo como se dirige a la salida

Narra Samanta

No sé porque o cual sea el motivo, pero Eliot no ha dejado de verme, sentía su mirada en todo momento

Estas bien Sam – me dice mi hermano

Te diste cuanta que Eliot no dejaba de mirarme – le digo

La verdad no, pero es su trabajo – me dice mientras no dirigimos al auto

Si supongo que si – es raro

Señorita – escucho su voz

Carajo – que susto – como mierda apareciste aquí