Hola, soy Andrea, tal vez te parezca extraño que te deje esta carta en tu casa, pero créeme tengo mis razones, por eso te pido ayuda, aunque sea probable que este muerta para cuando hayas terminado de leer esta carta, o tal vez no, eso es lo que quiero creer y es por ello que escribo esta y varias cartas que te llegaran si es que desaparezco y sigo con vida, sigue las pistas, por favor sálvame, ayúdame Robert.
Esas fueron las palabras exactas que había leído en aquella carta, en ese momento me surgieron varias preguntas, cómo el por qué Andrea, mi vecina de al lado me había dejado esa carta en mi dormitorio, Andrea y yo éramos vecinos desde que recuerdo, pero jamás tuvimos algún tipo de vínculo cercano de no ser un saludo en la mañana o en las noches y que en ocasiones la conversación podría alargarse por algún evento fuera de lo normal en el barrio, éramos solo eso, vecinos o conocidos, jamás llegamos a ser amigos, entonces, ¿por qué me escribiría a mí de entre todo su grupo de amigos una carta pidiéndome ayuda?
Solo quisiera que todo lo que se desbordaría por haber leído esa carta jamás hubiera pasado, en estos momentos solo busco un culpable ya no solo de la desaparición de Andrea sino del asesinato de varias personas y me encuentro solo, Andrea por favor, ahora soy yo el que espera que no estés muerta, espérame, necesito respuestas.
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Búscame
Random¿Eres mi condena o salvación?, me has atrapado en tu red de misterio, yo solo quería ayudarte no destruir mi vida en el proceso. La vida de un sosegado profesor es perturbada por una enigmática joven de 20 años, la historia de estos dos personajes a...
