⚠ Advertencia: Historia re-cliche ⚠
Cuando un adolescente cumple su mayoría de edad busca sus sueños encontrando su futuro y Hoseok nunca pensó que construir su sueño sería un tanto complicado
¡Pero lucharía por su sueño!
Sin embargo, la responsabil...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Y.. si mejor me voy? — se pregunto así mismo el omega Hoseok, mientras se adentraba entre las personas en busca de un espacio libre
Definitivamente si quería algo tranquilo no debía salir un fin de semana y peor era los días libres y de vacaciones para todos los estudiantes
El aire estaba contaminado de feromonas de felicidad y erotismo uhhh, estaba muy seguro que pronto encontraría a una pareja más acalorada de lo normal
Su sonrisa salio a brote cuando observó la isla del barman libre, y con más ganas camino tomando asiento en el silla redonda, soltó un suspiro observando las bebidas en el pequeño cartel
— Tu chaqueta me gusta. — hablaron a su lado
Hoseok sonrió ante el cumplido volteando a ver a una hermosa beta, quien tenía un cigarro en su boca mientras prácticamente lo devoraba con la mirada
— Gracias, la compré en el centro comercial, no recuerdo la tienda, pero sus diseños eran muy bonitos
— eres Omega, ¿No es así? — pregunto la contraria sonriendo y bebiendo de su propio licor
— efectivamente.
— te invito un trago. — propuso mientras se apoyaba en la mesa — Hoy no vinieron mis amigos y estoy muy aburrida
— Me parece bien, no vine acompañado.
— ¿Es eso cierto? ¡Oh mis dioses!, pero ¿por qué no lo hiciste?, Aquí hay muchos alfas aprovechados — gruñó volviendo a calar de su cigarro — ¡TaeHyung!, Algo liviano para mi amigo...
— Como ordene señorita Xiao chen... — respondió el castañito, comenzado a preparar la bebida
— ¿cuál es tu nombre? — le pregunto la beta
— soy Hoseok. — respondió sonriendo — al escuchar su nombre y verla, dudó y sea de aquí...
— y tienes toda la razón, soy del oriente de Pekín, china
— oh... — balbuceo el menor sin decir mucho, pues no tenía de que hablar
— pareces un niño. — agrego la mayor
— No, no, claro que no. — negó con la cabeza rápidamente, sonriendo amablemente — cumplí 20 este año en febrero...
— eres muy tierno. — halagó sonriendo, mientras bebía de su copa — debes tener cuidado con los alfas, la vida no es rosa después de todo
— usted es muy buena, seguro y tiene una magnífica pareja — le hablo mientras tomaba su vientre de manera ligera, sentía un extraño cosquilleo en este
— Te equivocas. — negó observando a el castaño dejar un vaso de cristal — ninguno resultó muy bueno después de todo, pero da igual, ahora puedo coger con quien quiera.