Capitulo 10 Amnecia

5 1 0
                                    


- ¿Que paso? ¿Dónde estoy? - seguía escuchando que me decían algo, pero no entendía que. Intente incorporarme, pero me sentía mareada, la gravedad me regreso de sentón al suelo.

-wo wo wo wo con calma acabas de regresar en sí, papá tráela a la cama, recuéstala deja que la revise - dijo la chica mientras caminaba hacia un sitio lleno de mantas y con las paredes cubiertas de plantas y frascos con líquidos extraños

- si- el gran hombre respondió sin titubear y me recostó en una cama suabe y cálida.

-que no se mueva- le dijo con voz firme y sin titubeos

- ¿Qué me van a hacer? ¿Qué es lo que me está sucediendo? - dije con la voz temblorosa y algo irritada por no tener respuestas a nada.

- Solo quiero ver si te encuentras bien, fue un fuerte golpe el que te pusiste y no es normal que las personas se desmayen de la nada. Quiero ver si no tienes alguna herida, golpe o picadura de algún tipo para descartar que tu sangre este envenenada y así poder llegar a la conclusión de que es lo que puede estar pasando con tu persona, no te preocupes seré delicada y no sentirás nada te prometo que después de esto podrás ser libre de quedarte o irte si así lo deseas- me dijo muy convencida y con una ligera sonrisa tranquilizadora en su rostro haciéndome sentir algo más tranquila.

- Esta bien hazlo no es necesario que me sujeten no me moveré lo prometo - dije subiendo las manos en señal de rendición e intentando que fuera un gesto de cooperación

- Perfecto, dime si te duele algo cuando lo toque es importante que no me mientas, pero si lo haces lo sabre soy muy buena para identificar cuando las personas me están mintiendo- me dijo mientras me guiñaba un ojo y se acercaba con paso decidido a mí.

En un momento comenzó a tocarme todo el cuerpo con sus avilés manos revisando cada hueso, toco cada uno de ellos para ver si no tenía fracturas al comprobar que todo estaba en orden se sentó junto a mi y miro fijamente al gran hombre que nos miraba desde un rincón con cara de preocupación

-Padre debo pedirte que abandones el recinto por un breve momento la siguiente fase es una revisión visual y necesito que nuestro invitado se sienta cómoda- le indico con un ademan la puerta y se jiro hacia mi - es importante que te quites la ropa y te tapes con esto - me entrego una túnica de un suabe algodón teñida de un rojo opaco casi color sangre seca

-Ammm está bien ¿pero? ¿para que necesito ponerme esto? Si me tienes que revisar ¿no sería mejor que no me la pusiera? - le pregunte con una sonrisa picara en el rostro

- prefiero que te la pongas para que no te de frio mientras te reviso será un tiempo bastante extendido y no quiero que estes incomoda- respondió sin notar mi sonrisa siguió muy concentrada en lo suyo, sin mas opte por hacerle caso y me puse la túnica que me ofreció era más suabe de lo que parecía incluso mucho mas ligera y tenia un aroma sutil a húmedo y plantas podía distinguir un pequeño perfume a lavanda que emanaba sutilmente de la tela con cada movimiento.

-¿te encuentras cómoda?- pregunto mienras se acercaba ami a paso decidido sonriendo confortantemente - lamento que nos conociéramos en estas circunstancias pero tengo que hacerte barias preguntas para que estemos un poco mas seguros de lo que te puede estar ocurriendo pero no tengas miedo esto no te dolra ni un poco

- esta bien puedes hacer lo que sea y te responderé todas tus preguntas sin dudar ni mentir lo prometo- dije mientras hacia una tache sobre mi corazón.

- ¿Qué es lo último que recuerdas? - pregunto intranquila

- recuerdo que estaba aquí caminando y después todo negro - respondí con miedo. -pero no recuerdo nada mas hasta ahorita no se como llegue a tu aldea o en donde me encuentro no recuerdo mucho más atrás recuerdo un árbol, humo, unas mascaras aterradoras, mucho ruido, recuerdo sentirme asustada y desconcertada con frio pero un frio que se mete hasta los huesos - continue mientras sentía como el color se esfumaba de mi rostro y comenzaba a sudar frio dejándome con una sensación de inseguridad y miedo, inconscientemente comencé a aferrarme a la tela que recorría mi cuerpo como un niño asustado se aferra a su mantita de consuelo

-mmm eso es interesante y extraño, yo he vivido aquí toda mi vida y nunca e visto ni escuchado nada parecido me suena muy sospechoso, por favor bájate la túnica abajo de los hombros - dijo mientras se sentaba a mi lado y acercaba una lamparita de aceite para darle mejor luz- ¿de dónde vienes? ¿cuál es tu casa? - Pregunto sin quitarme los ojos de encima

-no lo se creo que mi casa esta muy muy lejos de aquí - la mire algo cabizbaja al pensar que nunca podría regresar del lugar del que había llegado- ay tienes las manos tan frías como las de un muerto!!! - grite mientras ella se echaba a reír

- perdona devi avisarte antes de tocarte, pero me quede inmersa en la conversación ¿pero recuerdas tu nombre? - me miro con ojos de preocupación se le notaba en la mirada que tenia miedo de que respondiera que no

-claro que si recuerdo mi nombre... si si si lo tengo en la punta de la lengua...

-por favor no estes jugando esto es serio ¿lo recuerdas o no?

- perdón perdón si lo recuerdo mi nombre es Lexa aunque todos mis amigos me dicen lex o eso creo - dije mientras me acomodaba en el lecho calenté en el que me encontraba

- listo puedes subirte la túnica vamos por la parte de abajo

-por favor calienta tus manos antes de tocar mi trasero si n el pecho se sintió horrible no me quiero imaginar como se sentirá ay donde no llega el sol jajaja- me eche a reír mientras me paraba para que me revisara bien

-bueno lex tienes todo normal a excepción de esta cicatriz en tu espalda parecen arañazos ¿sabes con que pudiste hacerte esta herida?

-no tengo idea ni siquiera sabía que la tenia ¿tu como crees que llegaron hasta mi espalda? Y la mejor pregunta es ¿Cómo es posible que me lastimara tanto y que no recuerde nada del incidente?

-esas son preguntas a las que no puedo responder pero lo que si te puedo decir es que eres muy valiente acutuas de una manera muy humana a pesar de haber pasado por tanto y de no recordar nada yo le atribuyo tu falta de memoria a un gran golpe contundente en la cabeza, el lado bueno es que fuese lo que fuese que paso sobreviviste y estas lista para seguir adelante aquí en mi aldea podrías tener comida agua amigos y serias un miembro productivo se ve que aprendes rápido y a juzgar por la espada que traías cuando mi padre te trajo eres una guerrera habilidosa aunque no recuerdes como usarla aquí en esta aldea podrás aprender de nuevo y encontrar nuevas formas de sorprenderte y quien sabe recordar lo que paso y de dónde vienes ¿te gustaría quedarte aunque sea en lo que recuperas la memoria? - me dijo mientras me extendía la mano - a si y antes de que lo olvide puedes vivir aquí mientras construimos tu tienda- me dijo sonriente- hace mucho que nadie vive conmigo y me ciento a veces me siento algo sola aquí en una tienda tan grande

- por supuesto no tienes que insistir mas y me encantaría quedarme contigo pero enseñame lo que haces quiero aprender a curar como lo haces tu eres una persona mágica- le sonreí y le tome la mano que me ofrecía jalándola hacia mi y dándole un fuerte abrazo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 08, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

No todo es lo que pareceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora