Reacciones de los personajes de Tokyo Revengers al decirles que estás esperando un hijo de ellos. <3
Todo el contenido aquí es totalmente escrito y creado por mi, está prohibido copias, adaptaciones o publicarlo en algún otro lugar sin mi autorizac...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Entreabrías tus ojos, sentías aun un ligero mareo, cuando por fin pudiste enfocar tu vista te encontraste con la imagen de un Souta sumamente preocupado, sus ojos se veían un poco hinchados y sus pestañas mojadas te revelaban que había estado llorado.
—¡¡SOUTA!! ¿Qué pasa, estás bien? — le dijiste levantándote de golpe, apoyabas una de tus manos sobre la cama para sostenerte y con la otra acariciabas la mejilla del peliazul.
—¡Tu eres la que se ha desmayado! ¿Por qué te preocupas por mí ahora?— dijo reflejando angustia, mientras acariciaba tiernamente la mano que habías puesto en su rostro.
—Me alegra que hayas despertado T/N, pero aún así necesito llevarte a un médico mi amor, realmente estoy preocupado por ti, no es normal que te hayas desmayado de la nada.
Te conmovió la preocupación reflejada en su rostro, podías sentir un leve temblor en sus manos. El pobre se había llevado un buen susto al verte desfallecer. Sonreíste internamente pues sabias que tú desmayo no era algo por lo cual debían preocuparse, más bien era un motivo de felicidad.
—¿Sabes?, creo que vuelvo a marearme Souta.— dijiste fingiendo la voz
—¿D-de verdad? —dijo Souta asustado, tomándote por los brazos para evitar que cayeras.
— Si de verdad, creo que necesito...
—¿Qué? ¡¿Qué es lo que necesitas, bonita?! — cuestionó desesperado.
Sonreíste, acto que causó confusión en Souta, jalaste fuertemente de su brazo, haciendo que el peliazul cayera en la cama junto a ti. Te abrazaste a él y escondiste tu rostro debajo de su brazo.
—¿T/N? —dijo confuso. —¿Te sientes mal? ¿Quieres que llame al médico?
—No necesito ir al médico Souta. — te miró incrédulo.
—Yo... solo necesito del cariño del tierno padre de mi pequeño bebé. — dijiste suavemente, sintiendo como el corazón de Angry latía con fuerza. Levantó su brazo encontrándose frente a frente contigo.
—¿El padre de tu pequeño bebé?— dijo ya con los ojos inundados de lágrimas. —Estas diciendo que... ¿voy a ser papá? —preguntó sollozando, sus mejillas estaban enrojecidas y apretaba sus labios para evitar echarse a llorar.
—¡SIIII! —sonreíste —Y no serás cualquier papá Sou ¡vas a ser el mejor papá del mundo! —de un movimiento rápido te posicionaste encima de él, recostando tu cabeza en su pecho, él te envolvió en sus brazos, sentías sus lágrimas correr por su cara. Él definitivamente no podía dejar de llorar.
