🍃吊人之樹🍃[-Todoroki Shoto x Male Reader-]

𝟎𝟐

El árbol del ahorcado, un roble seco con más de 500 años, algo sumamente raro ya que se dio el doble de la edad que logra vivir uno de los ejeplares.

Será, será que al árbol vendrás, que por matar a tres, un hombre colgó en él.

Así dicta la leyenda sobre aquel árbol estando presente aun a nuestras fechas, algo raro guarda ese misterioso árbol y lo describiré

_______ cerró el libro que había tomado mientras se dejaba caer en el respaldo de la silla de madera, estaba totalmente frustrado, no había encontrado nada que le ayudase a saber más sobre la historia de aquel estupido y viejo roble.

Se levanto de su silla y salió de la biblioteca maldiciendo en murmullos la poca información, era totalmente injusto que ese árbol tuviera más de 500 años y no hubiera información concreta para responder sus dudas.

Caminaba por las calles llenas de barro por la recientes lluvias que cada vez se hacían más presentes conforme el paso de los días lo cual significaría que dentro de poco tendría que poner los baldes para que el agua de la lluvia los llenara.

-estupido libro, no sirve para nada.

Caminaba de regreso a su hogar lo más rápido que pudiera, quería buscar aquellos libros sobre el árbol que su padre le había heredado, sin duda, su curiosidad por aquel viejo roble había sido dada por él pues, su padre siempre le contaba la misma historia y los escritos en los cuadernos que hablaban sobre una fecha especial marcada en cada página de los libros del árbol le hacía preguntarse, por qué era tan importante.

Si no hubieran sido por las historias que le contaba su padre antes de dormir no habría tomado tanta curiosidad, poderte ver ahí al anochecer, así dictaban uno de los relatos que le contaba.

Al llegar a su hogar, tomo un gran respiro antes de entrar, se preparaba mentalmente para poder tomar ese valor de siempre, y sin más, entró a la casa tratando de no hacer ni el más mínimo ruido.

Al cerrar la puerta observó en todas direcciones en busca de alguna señal más no fue así, todo parecía despejado así que sin esperar mucho comenzó una caminata silenciosa y apresurada tratando de ir directo a su habitación

Fue entonces que estando a unos cuantos centimetros de la puerta hizo sonar aquella chillona tabla, aquella maldita y estupida tabla, no bastó más para que antes de poder voltear detrás de si mismo escuchara la voz de aquella persona causándoles un aterrador escalofrío, aún más miedo fue cuando pudo escuchar la voz en su oído

-¿hola cariño, donde te has metido eh?

Esa voz causaba temblores involuntarios y escalofríos en su cuerpo con tan solo escucharlo, lentamente se giró para estar cara a cara con aquel hombre

-¿que pasa pequeño?-preguntó en una obvia respuesta.

El hombre levantó su brazo dirigiendolo al rostro del chico en el cual dio unas cuantas caricias con su fría y roñosa mano causándole una sensación inevitable de asco ante tan repulsivo y pecaminoso toque.