{ Confié en ti }- Kao Up FANFIC "El Guardaespaldas"

🖤 Capítulo 2 🤍

Habían hecho todo un evento para esto. Todo esto era demasiado para mí. Estaba en las nubes. En media hora Fashion Idol me presentaría como el nuevo diseñador de la empresa frente a cientos de personas. Apenas había llegado a Bangkok, me recibieron en el aeropuerto y me llevaron directo al edificio de la empresa. Me presentaron a más de 20 personas y apenas pude recordar el nombre de un par. Ahora me encuentro en los camarotes de la Sala Chalermkrung Royal Theatre, con una persona maquillándome, otra arreglando mi pelo, y otra diciéndome qué prendas usaría. Creo que estaba agradeciendo cada 5 segundos, era tanta gente haciendo tanto. Wut estaba afuera del camerino haciendo llamadas. Pobre hombre, ha hecho el doble de lo que yo desde que llegamos. Le debo tanto. Del otro lado de la habitación, estaba Up, miraba detenidamente a las personas a mi alrededor. "Todo un guardaespaldas" pensé y luego reí por el mal chiste. Esto hizo que Up volteara a verme y también sonrió. Me di cuenta después de que había suspirado mientras nos mirábamos porque Up rió. Maldición. No sé si me sonrojé después de ese momento pero Up seguía viéndome.

Justo cómo lo había planeado, el contrato de Up como mi guardaespaldas no había tenido ningún inconveniente. Fashion Idol pagaría su servicio, al igual que su estancia en Bangkok, un apartamento al lado del mío. Terminaron de arreglarme, me di un último vistazo al espejo antes de salir del camarote.

- Wow. Toda una celebridad Kao. - dijo Up acercándose al espejo.
- Estás exagerando.
- Creo que al final sí tendré que defenderte de tus fans, querrán lanzarse sobre ti.
- Que malísimo chiste.
- No, es la verdad. - Up me miraba desde el reflejo del espejo. El tener su mirada en mí me puso un poco nervioso. En ese momento caí en la cuenta que estabámos los dos solos en el camarote.
- Bueno, sí es así. Mi vida está en tus manos Up. Si nos atacan, correré sin ver atrás.
- Es lo mejor. Yo los distraría en lo que tú corres. Tú sálvate.
- Gracias Up. Eres un buen guardaespaldas. - giré a verlo y de repente estallamos en carcajadas luego de la conversación más sin sentido que habíamos tenido. - Puedo decir que apenas llevas trabajando dos días conmigo, y no me arrepiento de que seas mi guardaespaldas, siento que más bien te contraté para ser mi amigo.
- Me has contratado para ser tu guardaespaldas, tu amigo, tu confidente, el que te dirá lo genial que luces, ser tu mascota. Lo que quieras, tienes el paquete completo conmigo.
- ¿Lo qué quiera? - pregunté con tono curioso. Up pareció interpretar mal mi pregunta porque su rostro sonriente cambió a uno de asombrado. -Oh por Dios, no, no. Deja de imaginarte cosas horribles. Al preguntarte eso me refería a... si te pedía que me hicieras un pastel o fueras a hacer las compras, lo harías también. Pero era broma, realmente no quiero que hagas eso, era solo un ejemplo de a qué me refería al preguntarte si harías lo que yo quisiera.
- Okaaaaay, tranquilo. - me interrumpió. - No imaginé cosas horribles cómo tú crees.
- Lo siento.
- Más bien, ni me diste tiempo de pensar en algo. Descuida.

Ambos nos quedamos en silencio parados frente al espejo viendo a cualquier otro rincón de la habitación con tal de no cruzar miradas. Up rompió el silencio preguntando si debíamos establecer límites en la relación laboral.

- ¿Te refieres a que pongamos reglas de qué debemos hacer y qué no?
- Sí.
- ¿No te agrada cómo nos relacionamos? - pregunté un poco decepcionado.
- Sí me agrada. Pero pregunto si quieres que mejor mantegamos una distancia... ¿personal? No quiero que pienses que abuso de nuestra relación y te falto el respeto.
- ¿Qué? No he pensado eso, para nada. Prefiero que podamos hablar y bromear entre nosotros. Que estar serios y distantes. Confiaría más en ti si convivimos más y somos más cercanos.

Entendía la preocupación de Up y la relación laboral entre nosotros. Podía ser muy amigable y bromista, pero también muy profesional y no quería perder eso conmigo.

- Acordemos algo. Si en algún momento siento que tú sobrepasas la línea laboral, te lo diré. No todo tiene que ser formal o distante creo.
- Entendido jefe. - dijo y ambos reímos. - Sal, al parecer te harán una entrevista antes de subir al escenario.
- ¿Vendrás detrás mí? - pregunté.
- Siempre.