′BB′ 𝘌𝘭 𝘎𝘳𝘶𝘱𝘰 𝘋𝘦 𝘓𝘰𝘴 𝘖𝘯𝘤𝘦 ⁽ᵇᵃⁿᵍᵖⁱⁿᵏ⁾

★ capítulo veintinueve ★

— El desayuno estaba muy rico— hablo la tailandesa mientras se giraba a ver a su acompañante

— ¿no quieres mejor pasar al postre?—Jeon le pregunto

Lisa rueda sus ojos — Mejor dejemos eso para la noche — contesto ella

Ambos iban caminando por los pasillos de la empresa pues ya había empezado su hora laboral

Los empleados los veían con normalidad caminar entre ellos, pues, desde hace ya un tiempo que se acostumbraron a verlos juntos en todo momento, aunque Lalisa y Jungkook no han revelado su relación secreta de ya un mes y algo

Luego de tantos encuentros que habían tenido y agregando también las citas escondidas, habían decidido iniciar con una relación privada que por los momentos solo ellos dos sabían

Y estaba bien para ellos, ambos se sentían cómodos con lo que tenían en ese preciso momento, evitaban problemas y dramas entre demás personas

Los dos miembros del grupo tenían en sus manos un vaso de cafeína que los acompañaría en el resto del día largo. Las dos personas paran en seco cuando una tercera figura se para frente a ellos e impide su caminata a las oficinas de la última planta

Jieun está frente a Lisa y Jungkook, su brillante cabello negro combina a la perfección con su tez blanca y su conjunto color purpura

— Kookie, aquí estas— hablo la mujer, ignorando por completo la presencia de la tailandesa

— Aquí estoy — le respondió el chico — necesitas algo

La chica asiente lentamente dándole una mirada extraña al hombre — Kookie, la noche anterior me dejaste muy intrigada con tu mensaje de texto — Lalisa eleva una ceja y le da una corta mirada al hombre a su lado — creo que sería bastante bueno que terminemos la conversación pronto ya que moriré de la curiosidad si eso no pasa

Ahora la mujer repasa con la mirada a Lalisa, de pies a cabeza

— Pero a solas — Lalisa comienza a golpear la parte de adentro de su mejilla con su lengua húmeda, la presencia de esa mujer está comenzando a fastidiarle

— Jieun yo-

-—Estoy desocupada en este momento en mi oficina por si quieres hablar de ello y así tener mejor privacidad — propone la mujer

— podrías dejar de ser tan lanzada e insistente — Lalisa no puede resistirse y termina hablando

— ¿Disculpa? — pregunta la mujer, ahora dirigiendo su atención a la menor

— Como oíste, te ves ridícula insistiéndole a un hombre que no te presta ni la más mínima atención

— No te metas en problemas que no te incumben, no eres absolutamente nadie en nuestras vidas

Soy la novia del que te le andas lanzando, perra

Quiso decir, pero se contuvo

La tailandesa ya estaba cansada de la situación, por lo que prefirió girarse a su novio con una mirada cansada

— iré a mi oficina — comunico y se dio vuelta para caminar, pero una mano la detuvo

— Espera — su novio le hablo — voy contigo — ahora se giró a la mujer que estaba frente a ellos — Tengo cosas importantes que hacer en este momento

Y así fue como comenzaron a caminar hasta llegar al ascensor

— ¿Me puedes explicar que fue toda esa escenita? — hablo Lalisa una vez las puertas del ascensor se cerraron