Maquillaje. La forma más fácil de tapar quienes somos en realidad. Vas cubriendo una a una cada parte de tu cara, aquellas que te hacen ser quien eres. Esas ojeras de haberte pasado la noche llorando. El grano que te ha salido por el estrés de los exámenes. Los labios con los que diste tu primer beso. Todo eso son recuerdos que poco a poco vas cubriendo con ese pincel manchado de corrector.
Cirugía plástica. La forma más fácil de alimentar los estereotipos. ¿Quieres el abdomen plano? No pasa nada, por solo 6.000€ lo puedes tener. Hemos dejado a un lado el esfuerzo, el sudor, el orgullo, escogiendo el "camino fácil", el de los resultados inmediatos y la felicidad instantánea.
Es curioso, como dos cosas que parecen inofensivas pueden causar tanto daño a la sociedad. Cada vez hay más métodos para cambiar completamente nuestra apariencia, pero muchos menos para querernos. Y es que si no nos queremos nosotros difícilmente alguien más nos va a querer. Es algo que he terminado aprendiendo por la fuerza. Porque para decir yo te amo, primero hay que decir yo (nótese que me estoy viendo física o química).
Entonces yo me pregunto, ¿donde queda el amor propio?
ESTÁS LEYENDO
No pienses tanto
Short StoryVale antes de nada decir que se van a mencionar trastorn0s alimentici0s, suicidi0, ansied4d, aut0lesiones,... Básicamente temas que a algunas personas les pueden resultar incómodos o simplemente les hace revivir momentos del pasado que no quieren re...
