Make you mine ❥ |Kooktae|

༄ Capítulo 14 (Parte uno)

Jungkook en realidad lo hizo venir antes de la fiesta. Pero se fueron de todos modos.

Tae trató de ocultar su nerviosismo mientras caminaban por el camino hacia la casa de Hoseok. Era el típico lugar alquilado por estudiantes, nada demasiado lujoso pero lo suficientemente grande como para que Tae supusiera que Hoseok vivía allí con al menos otros seis compañeros de casa, si no más. Le había preguntado a Jungkook pero tampoco estaba seguro, dijo que el número seguía cambiando de mes a mes.

Tae podía escuchar el estruendo de la música estremeciéndose a través de las paredes mientras subían los escalones del porche, los sonidos de risas estridentes y voces fuertes. Tragó saliva. Simplemente no sabía por qué las fiestas tenían que ser tan ruidosas . No habría ningún rincón tranquilo al que escapar, ningún lugar para acurrucarse con un libro.

Oh dios, ya lo estoy haciendo. No soy nada divertido y Jungkook va a ver eso y va a saber que no soy más que un patán tonto.

"Oye", dijo Jungkook, tocándose la mano mientras estaban fuera de la puerta. "¿Estás bien?"

"Um, sí", dijo Tae, mirando dudoso a la puerta. "Ha pasado un tiempo desde que estuve en una de estas cosas". Hacía tiempo que no iba a una fiesta y se sentaba al lado de Minho, escuchándolo hablar con uno de sus amigos mientras ignoraba por completo a Tae. Hacía tiempo que la gente no se burlaba de él por quedarse con la gaseosa, presionándolo para que tomara 'solo un trago, vamos, ¿qué te pasa?' Había pasado un tiempo desde que terminó encerrándose en el baño, tratando de escapar del ruido, de la gente, solo emergiendo horas después para encontrar a Minho todavía bebiendo, sin siquiera haber ido a buscarlo, sin siquiera preguntarse dónde estaba...

"Tae", dijo Jungkook suavemente, y Tae se giró para mirarlo. "Realmente no tenemos que estar aquí si no quieres. Podemos volver al dormitorio y pasar el rato, solo nosotros dos".

Nada lo atraía más que la idea de dar la vuelta y volver a casa con Jungkook, pero resistió la tentación de aceptar la oferta de Jungkook de pagar la fianza. Sería la salida más fácil y Jungkook lo había invitado a salir a algún lugar, algo que pensó que nunca sucedería. Al menos quería intentar disfrutar de la fiesta, por el bien de Jungkook.

Así que negó con la cabeza y le dio a Jungkook una pequeña sonrisa. "No, está bien", dijo, "será divertido".

"Sí, creo que sí", dijo Jungkook, "especialmente porque estás aquí".

Tae bajó la mirada, mirando tímidamente a sus pies. "Bueno, no sé sobre eso..." Aun así, no pudo evitar sonreír ante lo que había dicho Jungkook.

"Sí", dijo Jungkook, acercándose y Tae lo miró. "Estoy muy contento de que hayas decidido venir conmigo esta noche, Tae". Trazó un dedo suavemente por el brazo de Tae. "Pero si quieres irte en cualquier momento, solo dímelo, ¿de acuerdo? Si no te estás divirtiendo, entonces yo no me estoy divirtiendo".

"¿De verdad?" Tae susurró.

Jungkook le sonrió. "Bueno, sí, obviamente vine aquí para divertirme contigo así que-"

Pero Tae lo besó, cortando sus palabras. Jungkook hizo un pequeño ruido de sorpresa pero luego le devolvió el beso, envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de Tae, sonriendo contra sus labios. Tae no sabía de qué otra forma transmitirle a Jungkook cuánto significaba para él, que le importaba lo suficiente como para ser tan tranquilizador, tan atento. Podría haber sido una cosa pequeña para alguien más, pero Minho nunca le había dicho algo así antes, nunca pareció importarle tanto si Tae se divertía o no. De hecho, se molestaría con Tae por no querer ir a fiestas, diciendo que necesitaba 'aligerarse'.

Pero el hecho de que Jungkook estuviera tan preocupado por si la estaba pasando bien o no hizo que el corazón de Tae se llenara de gratitud. Jungkook quería que él estuviera allí, quería que se divirtiera, no lo iba a tratar como si fuera una carga, un obstáculo que se interponía en el camino de su propia diversión. No como lo había hecho Minho.