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"_____🍷_____"

— No me siento tan bien — murmuró el pelinegro mientras dejaba estacionada su motocicleta y quitaba el casco.

Porque comimos como cerdos — se burló Venom al ver como su portador guiaba una de sus manos con malestar hacia su estómago — Sólo necesitamos los cerebros por la feniletilamina. Tu débil cuerpo de humanito no soporta tanta comida —.

— ¿No se supone que curas todos los males, parásito? —.

Sí, pero por insultarnos de esa manera no te curaremos — dijo ofendido el simbionte ante aquel apodo tan denigrante que había usado en su contra.

Jungkook se acercó a la puerta y sacó las llaves de su bolsillo — La próxima vez sólo comeremos si mucho a cinco —.

Tan sólo esa noche se habían encargado de más de diez personas, se habían emocionado demasiado con respecto de poder comer y desaparecer personas sin tener problema alguno con la policía, ya que esta vez trabajarían para los peces gordos de San Francisco, lo que quería decir que estarían completamente en cubiertos, ya que si ellos eran descubiertos sus "jefes" también lo estarían.

Se habían convertido en una extraña clase de mercenarios o sicarios, lo que mejor les quedara. Pero eso no preocupaba realmente a Jungkook, ese lado sucio de cómo vivir siempre había sido parte de su vida, creció así y fue lo que se le enseñó. Porque si bien era un peso con el cargaba en su conciencia por su nula empatia, aprendió a vivir con ello y dejó de importarle ya hace un tiempo.

Necesitamos más cabezas que esas Jeon — alegó Venom mientras el pelinegro metía la llave en el cerrojo para abrir la puerta.

— Entonces a la próxima has que me sienta mejor — murmuró entrando a su hogar.

— ¿Quién te hará sentir mejor? —.

En ese momento la luz de una lámpara se encendió, dejando ver a Jimin con el sueño fruncido parado en medio de la sala.

— Muñeco — soltó con nerviosismo y sorpresa, tratando de actuar normal pero la forma tan recta de su cuerpo demostraba lo tenso que se encontraba.

Fue un gusto conocerte —.

El pelinegro dejó su chaqueta y cazco en la mesa tratando de acercarse al rubio, pero este se alejó.

— ¿Se puede saber dónde carajos estabas? — preguntó con molestia, y tenía mucha razón de estarlo.
Se despertó a las dos de la mañana esperando que su lindo y grandote novio estuviera a su lado, pero el lugar al lado del suyo en aquella cama estaba vacío, y en el departamento no había rastro de Jungkook.

— Yo- —.

— Jeongguk, son las cuatro y media de la mañana, me preocupe porque no venias, dejaste tu maldito celular y — su voz poco a poco fue disminuyendo, agachó su cabeza para luego ver a su novio con inseguridad — ¿Qué estabas haciendo? —.

Estás muerto — se burló Venom, pero en el fondo él también temía de la idea que se había creado Jimin en la cabeza.

Jeon dejó escapar un suspiro y sacó un papel de su bolsillo — Renuncie — dijo mostrando la hoja donde efectivamente estaba su carta de renuncia firmada por su jefe.

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⏰ Última actualización: May 30, 2022 ⏰

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𝙈𝙖𝙣𝙞𝙖𝙘⇢kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora