HI, DADDY ━━ to

RAYNA CRUZ

— ¿TÍO STEFAN? —pregunta Lilith confundida para luego soltar un chillido emocionada y saltar en brazos de su tío quien se veía confundido pues la última vez que vio a su sobrina ella no estaba...así—. ¿Qué haces acá? ¿Y Damon? ¿Algo está pasando? ¿Tú en New Orleans?

— ¿Lils...? —le llama Stefan confundido para luego acariciar la mejilla de su sobrina reconociéndola al ver sus ojos y el collar de su cuello—. Tengo un problema y necesito tu ayuda junto a la de los Mikaelson, por desgracia. Damon está en un jodido problema con un hombre lobo. Él es un dolor de cabeza, pero ¿Sería posible que tu padre me dé algo de sangre por si algo sale mal? Luego hablaremos de porqué te ves como tu madre cuando tenía 26 años.

Klaus hace acto de aparición para luego reír ante la mentira que Stefan le estaba diciendo a su hija. Una mancha rojiza aparece en la camisa de Salvatore a la altura de su pecho. El híbrido se mueve con rapidez para abrir su camisa de golpe para así quitar las vendas manchadas de sangre y ver la cicatriz de su pecho.

— ¡Papá! —le grita Lilith pero luego suelta un jadeo al ver la cicatriz en el pecho de su tío.

—Esa es la marca de la espada Fénix —gruñe el rubio.

—Ya las has visto... —dice antes de levantarse el vampiro.

— ¿Has sido tan imbécil como para enfrentarte con Rayna Cruz? —gruñe apretando su mandíbula con fuerza.

— ¿Por qué crees que estoy aquí, Klaus? —le pregunta irónicamente Stefan mientras Lilith les miraba confundida.

—Así que viniste a esconderte, a buscar refugio en mi ciudad, a disfrutar mi hospitalidad donde duerme mi familia, incluida tu sobrina —se acerca a él y lo toma del cuello—. ¡Mientras tanto atraes un feroz sabueso con tu olor!

—No puede encontrarme en este bar —gruñe molesto el Salvatore mientras Lilith se mantenía callada.

—Tal vez no bajo este techo, pero sabes que ella nació en New Orleans. Aterrorizó mi ciudad durante años. Mató a mis mejores hombres con su espada en las escaletas de la iglesia de St. Anne —le informa Klaus—. Te perseguirá hasta tu paranoia y desesperación sobrepasen tu deseo de vivir. Aquí, en otro lado o en el infierno, te encontrará.

— ¿Qué? —pregunta la castaña estupefacta—. Papá, ¿Puedes ayudarlo, verdad?

—Sí sabes cómo huir de ella, dime que hacer, Klaus —le pide Stefan—. No busqué a Lilith antes para no ponerla en peligro pero estoy desesperado, por favor.

—Te diré lo que no haces —Klaus lo empuja lejos de él—. No atraes a una cazadora a una ciudad llena de vampiros. No bebes de mi bourbon mientras le mientes a mi hija en la cara. ¡Y no te atrevas a pedirme favores! ¿Está claro, viejo amigo? —le fulmina con la mirada mientras Lilith se mueve rápidamente tomando a su padre de brazo—. Vete de aquí y no involucres a Lilibeth en tus mierdas.

—Papá, si se va lo van a matar —suplica la loba con sus ojos llenándose de lagrimas.

—Pero si se queda, yo lo mataré —amenaza Klaus sabiendo que si mira a su hija a los ojos va a caer—. Largo de aquí y ya te lo dije, no involucres a mi hija en esto.

Stefan le mira seriamente durante varios segundos.

— ¡Vete! —le ordena Klaus por lo que Lilith suelta un pequeño chillido enojada y toma a su tío del brazo y salen del bar ambos. El híbrido aprieta su mandíbula con fuerza.