HI, DADDY ━━ to

SHEN MIN

— ¿QUÉ CARAJOS HA PASADO AQUÍ? —pregunta confundida Lilith quien estaba junto a Freya viendo todo el recinto destrozado. Había sangre en todos lados.

Escuchan ruidos en el comedor y se dirigen a el. Encontrándose a Elijah con ropa desgarrada y sangre en su cuerpo, además de una mordida en su brazo mientras que Niklaus estaba igual que él llenaba un vaso con su sangre.

— ¿Puedo preguntar que les pasó? —pregunta Freya anonadada.

—Tuvimos una pequeña charla acerca de nuestro pasado —se explica Klaus.

—Con toda la educación del mundo le expliqué a Niklaus que yo no soy su enemigo —dice Elijah—. Y a pesar de que entraron en la ciudad con el pretexto de la paz, en realidad Tristán y Lucien están aliados contra nosotros, hecho que requirió una sutil persuasión.

—Entonces le recordé a tu tío Elijah quién los enojó en primer lugar —sonríe Klaus mirando a su hija, por lo que Lilith arrastra una silla sentándose en ella. Se cruza de brazos y mira atentamente a sus familiares.

— ¿Y a qué conclusión llegaron, caballeros? —se burla Lils.

—Que nos expondremos y destruiremos a los primeros que por desgracia engendramos —contesta Elijah aceptando la sangre que le ofrecía Klaus.

—No podría estar más de acuerdo contigo —se sirve un trago de bourbon—. ¿Ves? Nosotros los caballeros sabemos cuando tenemos que hacer una tregua y dirigir nuestro enojo en una dirección especifica, Lils.

Ambos chocan sus vasos antes de beber.

La licántropo suelta una risa mientras se sirve bourbon también.

— ¿QUÉ SE TE OFRECE, GERARD? —pregunta la hereje en cuanto descuelga la llamada.

—Necesito de tu colaboración —dice—. Hayley atrapó a uno de los tipos de Tristán siguiéndola, lo noqueó, y lo tenemos en el gimnasio para una sesión de preguntas y respuestas. Necesitamos apoyo y que más que la mejor amiga sádica.

—Para allá voy, gracias Marcellus —ríe la bruja colgando.

—Tú tío no me contesta las llamadas —se queja Hayley en cuanto recibe a Lilith en la entrada de la iglesia.

—Creo que va a ir con Freya al campanario, le harán una visita a Bekah —explica la castaña para luego mirar al vampiro inconsciente atado a una silla—. Uh, bonita mordida.

—Gracias, Lils.

— ¿Con quién habla? —pregunta Lilith mirando a Marcel hablando por teléfono con alguien.

—Regresaste al fin —dice Hayley al ver a Shen Min despertar—. Podemos iniciar.

—Sí... —susurra el asiático—. Hay que iniciar.

—Aun queda tiempo —dice Hayley tocando su mordedura de Shen Min—. Si hablas, quizás te cure.

— ¿Por qué seguías a Hayley? —pregunta Lilith seria.

—Porque tenemos un uso para ella, ¿O será una diferente razón? —se burla el hombre—. Nunca lo sabrán, y no importará porque cuando me libere, te voy a romper los dientes de la mandíbula y lentamente sacaré los intestinos de tu cuerpo.

—Oye, ¿Qué te parece si te calmas? —le advierte Marcel.

—Y a ti... —dice Shen—. Los otros estaban tan felices cuando te nos uniste pero supe desde el inicio que estás podrido; lo has probado poniéndote en nuestra contra, por ello voy a liquidarte. Pero primero mirarás su extinción, suplicando.

—Bueno, me cansaste —dice Lilith quitándose su chaqueta aproximándose al Strix—. Adiós, querido.

Pero él se levanta en menos de un segundo y se gira mandando a Lilith lejos. La silla se rompe y él queda liberado. Entre los cuatro empiezan a pelear hasta que Marcel le toma por la espalda para que Hayley le saque el corazón, pero es imposible. Lilith gruñe sacando sus colmillos para luego morderlo en el cuello pero el vampiro totalmente enojado toma una pesa y golpea la cabeza de la licántropo con esta haciendo que caiga inconsciente en el piso.

— ¡Lilith! —grita Hayley pero Shen Min atraviesa su pecho con su mano, tomando su corazón y luego hace lo mismo con Marcel.

—Que poético —dice al escuchar a ambos gritar de dolor—. Tres guerreros peleando como uno solo...muriendo juntos.

De improviso, una estaca atraviesa su pecho y se ve a Elijah detrás del asiático.

—Marcellus, la próxima vez que te diga que te deshagas de la basura, intenta no tardar —recrimina el original para luego aproximarse a su sobrina. La frente de la joven sangraba por lo que el de traje le toma en brazos subiendo al ático donde Davina se quedaba. La recuesta en la cama luego de darle un poco de su sangre, notando como la herida se curaba poco a poco.

Al bajar, Elijah levanta a Shen Min del suelo y lo hace arrodillarse frente a ellos.

—Entre la pérdida de sangre y la mordida, no estoy seguro de que tengas mucho tiempo para obtener respuestas —le dice Marcel a Elijah y él asiente.

—Entonces aprovechemos el tiempo que tenemos —dice antes de dirigir toda su atención al asiático—. Tengo preguntas y espero respuestas.

Le saca la estaca del pecho, la cual solo rozó su corazón. Shen Min no se rinde e intenta pelear contra él, pero Elijah lo toma del cuello y lo obliga a mirarlo fijamente.

— ¿Por qué estabas siguiendo a Hayley? —le pregunta utilizando la compulsión.

—Se me ordenó sacarla del juego —murmura—. Ella es un obstáculo para lo que realmente queremos.

— ¿Y qué es lo que queremos?

—Davina Claire —responde Marcel por lo que Hayls se tensa.

— ¿Qué es lo que quieres con Davina Claire? —le pregunta Elijah.

—Tristán la necesita para activar un arma para utilizarla contra tu familia.

— ¿Qué arma? —pregunta Marcellus.

—Responde —ordena Elijah y él se resiste a seguir sus órdenes.

—Disculpa, estoy teniendo dificultades para oírte ahora mismo —aumenta el agarre Elijah.

—Yo preferiría morir —dice antes de golpearlo y lanzarlo contra Hayley y Marcel.

Caen al suelo. Shen Min se quita su anillo y arde ante la luz del sol que se filtra por las ventanas.

Ellos se quedan callados, en shock por lo que había pasado.