Capítulo único

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Segundo año consecutivo en el que hay fiesta en mi casa, lo cual por supuesto, a un bichito como yo, no le agrada en absoluto.

Mi nombre es Park Jimin y nadie me conoce porque soy lo que llaman "un antisocial de mierda".

Pero ¿saben que? No me molesta en absoluto, yo soy feliz así.

Me gusta mucho pasar desapercibido. No sé si tenga que ver con que soy gay o no, pero sinceramente no me interesa. ¿Por qué no me interesa? Bueno, en ese caso estoy completamente seguro de que se debe a qué aún no salgo del closet.

La razón por la cual no lo hago es completamente razonable. Soy gordo, nerd, y otaku. ¿Qué creen que pasaría si saliera del closet también?

Exacto. El blanco perfecto para el bullying, y realmente no necesito problemas cuando en mi familia me reclaman por cualquier tontería que amenace con arruinar su estúpida reputación.

Y así es como volvemos al tema "fiesta".

Lo que ocurrió el año pasado fué algo fuera de serie. Mi primo Taehyung decidió festejar su cumpleaños en nuestra casa y nosotros no nos enteramos hasta que comenzaron a llegar los invitados.

No pregunten la razón de su extraña decisión, pero la realidad es que está loco. La multitud que se reunió en mi casa fue descomunal, y el despelote que quedó luego para limpiar no tenía nombre.

Tanto mis padres como yo, que me tocó la labor de limpiar, estábamos indignados con el desastre. Lo que no compartimos en absoluto, fué el agrado de que la fiesta haya resultado todo un éxito.

Los amigos de Taehyung habían divulgado lo genial que había sido su fiesta de cumpleaños y de repente mucha gente saludaba a mis padres como si fueran mejores amigos.

La situación se volvió a repetir este año, Tae invitó a toda una multitud a mi casa y mis padres los recibieron encantados. Es más, ellos mismos contactaron a Taehyung para recordarle que la casa estaba a las órdenes para su fiesta.

Y aquí estoy, recostado en mi cama dentro de mi habitación que lamentablemente no tiene puerta, empujando constantemente los auriculares dentro de mis orejas.

La melodía tranquila que se reproducía a través de ellos hacia lo posible por acallar el ruido exterior pero no lo lograría ni aunque saliera al patio de la casa.

Fué entonces que sentí hundirse el colchón, justo junto a mis pies. Abrí los ojos asustado y me topé con un chico se cabellos verdes.

- ¿¡Ése es Deku!? -gritó sobre el murmullo, señalando mi poster de Boku no hero academia.

Lo observé un tanto confundido, pero finalmente asentí, un poco sorprendido de que un tipo como él viera anime.

El chico era bastante pálido, delgado pero con buen porte, vestía jean negro rasgado, campera de cuero negra, tenía actitud rebelde y era bastante apuesto. No le veía lo friki a su aspecto.

- ¡Me gusta mucho ese anime! -volvió a hablar sobre la música.

Me quité los auriculares y me senté a su lado en la cama. Le sonreí en respuesta, pues no quería gritar. Demasiado me estaba molestando el murmullo de tanta gente hablando y gritando al mismo tiempo.

- ¡Bonita sonrisa! -soltó, sonriendo landino.

Desvié la mirada avergonzado, confundido, y temeroso. ¿Sabía que era gay? ¿Por qué me decía eso? ¿Era algún tipo de reto?

En eso, dijo algo más que no comprendí, por lo que volví a mirarlo y le pedí con señas que me repitiera lo anterior. A lo que se acercó y volvió a hablar...

La bendita fiesta [YM OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora