1.Cotton

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Me desperté con el sentimiento abrumador de la asfixia impulsandome para tomar aire, una superficie me freno produciendo un fuerte ruido, ahora mi frente se encontraba pegada a esta fría y rugosa puerta.

Me incorpore lentamente a la situación, era un lugar pequeño, a penas podía mover la cabeza, y respiraba con dificultad, me había escondido aquí tras ser perseguida por un grupo de Z, no podía con todos. Las provisiones se estaban reduciendo, tenía que salir por más, cometí un error y ahora me encuentro atrapada aquí.
Pego mi oído a la pared más cercana para poder escuchar el exterior en busca de los gruñidos de los Z, pero en su lugar escucho voces humanas, ¿Acaso no escucharon el golpe de hace un momento?.
Trato de abrir el casillero en el que me encontraba, pero solo atino a hacer sonidos parecidos a los de un perro enjaulado, las voces se acercan a mi posición, cada vez me era más sencillo escuchar lo que decían, deje de empujar un momento y escuché con atención.
"tú abres, yo pincho" menciono una voz femenina.
¿Creían que yo era un Z?, me ofenden mucho, ¿Son buenas personas? Si no es así me metería en problemas si hablo, en dado caso de escapar del "pinchazo" cualquier podría darme al salir corriendo, no tenía opción tendré que arriesgarme.
"Yo" alcance a decir antes de que la puerta del casillero se abriera, inmediatamente me agaché para cubrirme la cabeza, una herida en el brazo podría tratarla, pero en la cabeza en este estado sería mortal "No soy un Z, lo prometo" escupí de golpe, mi voz salió quebrada por el miedo, estando hecha bola en el casillero, casi llorando y sin armas no imponía nada de respeto.

"¿Cuál es tú nombre?" Escucho decir a una voz masculina.

"¿Quiénes son ustedes?" digo en voz baja, sin moverme del sitio en el que me encuentro, mis manos cubren mi cuello y cabeza, mi pecho es cubierto por mis piernas, aún así mi espalda es blanco perfecto para un ataque.

"Déjanos verte" dijo ahora una voz femenina,  alce mi cara para verlos, son solo 4 personas, en estos tiempos esto era igual a un ejército, y nada podía asegurarme que no hubiera más.
"Dinos tu nombre" una mujer de estatura promedio y pelo liso posó su arma en mi cuello, no estaba jugando y yo no quería morir.

"Pueden llamarme cotton, pase aquí la noche tras ser perseguida por un Z, no tengo nada que pueda ser robado, vine aquí por provisiones" menciono poniéndome de pie y alzando las manos, no iba a buscarme problemas en mi situación actual. 

¿Qué más podría hacer?

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⏰ Última actualización: Jan 31, 2022 ⏰

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