¿𝑴𝒆 𝒗𝒆𝒛 𝒆𝒏 𝒕𝒖 𝒇𝒖𝒕𝒖𝒓𝒐? || 𝑩𝒓𝒖𝒏𝒐 𝒙 𝑪𝒂𝒎𝒊𝒍𝒐 ||

La Cena

Este es el primer capítulo, contiene mucho relleno pero es para que se vayan explicando muchas cosas, disculpen la mala ortografía.

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Ya habían pasado varias semanas desde lo sucedido con los Madrigal y el regreso de Bruno, todos estaban muy felices de tener a Bruno de nuevo a su lado, excepto Camilo.

No es que Bruno le cayera mal, simplemente le era difícil convivir con alguien a quien por mucho tiempo le hicieron creer que era el "villano de la historia". Cuando de pequeño querían que el durmiera le decían que su tío Bruno lo vigilaba y si no lo hacía el vendría y se lo llevaría en un saco a su torre (aunque fue un poco más tétrico enterarse que una parte de esa historia era verdad).

Desde que Bruno llegó, Camilo no dejaba de mirar lo, al principio era disimulado, trataba de que nadie lo notará, pero al pasar los días, Camilo dejó atrás la prudencia y lo miraba como si fuera algo de otro mundo y Bruno ya se había dado cuenta, no quería decir nada por miedo a que Camilo se molestara pero realmente ya estaba un poco incómodo y necesitaba respuestas.

El momento que todos esperaban ya había llegado, la mesa estaba lista y los platos de comida sobre ella solo hacía que los Madrigal babearan al verla, habían tenido tanto trabajo en el pueblo que aquella vista parecía un premio muy bien merecido.
Todos tomaron asiento, la abuela estaba a la cabeza, a un lado de ella Pepa, después Félix, Camilo, Dolores, Antonio y frente a la abuela estaba Bruno. Del otro lado de la abuela estaba sentada Julieta, (quien aún arrimaba diferentes platillo) Agustín, Mirabel, Isabela y Luisa.
Una vez se sento Julieta todos comenzaron a servirse entre pláticas y risas y uno que otro comentario alabando la deliciosa comida de Julieta.

Y como de costumbre la mirada de Camilo se posó sobre Bruno, quien lucia un poco tímido.

Alma: Bruno, mijo... Sabes que puedes servirte más que eso *Se quejo Alma al ver como su hijo nuevamente se había servido tan solo una arepa y una almojábana*. Tienes que comer bien, hoy tuviste mucho trabajo ayudando en el pueblo y imagino que debes estar hambriento. *Su voz sonaba preocupada, temía que en algún momento el fuese a desmayarse*

Bruno: Es solo que... *Bruno cerró sus manos y pensó en alguna escusa* n-no tengo tanta hambre... *hablo un poco bajo y aunque sonó muy convincente, Camilo sabía que mentía, pero no dijo nada y siguió comiendo, sin apartar la mirada de el*

Julieta: vamos hermano, sírvete más *julieta habló levantando se, tomo una olla con caldo de pollo y le sirvió en un plato para sopa* anda, no es por presumir pero esta ¡delicioso! *le guiño un ojo a su hermano y se sentó de nuevo*

Bruno: gra-gracias Juli *sonrió nervioso viendo el plato de comida frente a el*

Desde que Bruno había "regresado" cada que comían el solo se servía una cantidad muy pequeña y no era para más, durante 10 años tuvo que comer las sobras, o comida que cabía por agujeros pequeños (comida que sus amigas las ratas le llevaban).
No era la primera vez que Alma le llamaba la atención y le pedía que se sirviera más, pero el siempre tenía una excusa para evitar servirse raciones grandes

"El padre me dio algo de comida antes de regresar"

"Estuve comiendo frituras durante toda la tarde"

"Me siento asqueado por el trabajo de hoy"

Entre muchas más.