F I V E

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Jenna se pego como chicle a nuestro pequeño grupo.

Nos sentamos en el almuerzo. Nos conto que tenía una gemela, y oh sorpresa. Ni nada más que Zaneri, mejor amiga postiza de Elizabeth.

Jenna habla con total libertad, sin vergüenza o filtros. Era autentica y libre.

Jeri y Elaine al principio se incomodaron un poco. Ver a alguien expresarse con total libertad debió de haber sido incomodo.

Al final, ambas estuvieron de acuerdo en que Jenna es la chica de quien todos se deben de enamorar. Y que sin duda, era perfecta para mi.

Le conté a Jenna lo que me tenia tan acomplejada desde que lo supe, soy lesbiana. Jenna  solo me abrazó y no le dio importancia.


—No importa eso, lo que importa es la persona que eres, no lo que te guste; eso solo es una parte de tu persona. Yo apoyo completamente lo que tu decidas. Además, yo también me he sentido atraída por chicas. No es la gran cosa.

Sin duda Jenna era diferente a su falsa hermana, Zaneri. Y me cuestioné como dos personas tan diferentes podían ser hermanas.

Jeri y Elaine dijieron que no debía dejar escapar a esta chica.

Le conté sobre Elizabeth y mi amor super cliché no correspondido. Y sin dudarlo, sonrió y me apoyo. —Amor es amor, sin duda. Pero eso te hace daño, Diane. Verás, nadie decide de quien enamorarse, pero eso es tóxico y dañino para ti, deberías superarlo y hacer nuevas cosas. Puede que no lo entiendas y te duela, pero ahm, lo entenderás y te agradecerás por lo que hiciste por ti misma— Finalizó Jenna acariciando mis hombres y sonriendo.

Y lo que siempre recordaré.

Eso fue suficiente, Jeri y Elaine la adoraron.

Jenna es un ángel, y me arrepentí de todo lo que le hice a futuro.

Tus besos. ↳DianbethDonde viven las historias. Descúbrelo ahora