Izuku estaba profundamente dormido, pero lo despertó el sonido de la puerta al cerrarse.
El arrastrar de pies se hizo más fuerte cuando llegó a la cama, Izuku se giró para ver que Shouto estaba en casa, sonrió adormilado cuando una mano fría pasó por su cabello.
"Mm hola bebé". Dijo, Shouto tarareó.
"¿Cómo te fué en el trabajo?" preguntó Izuku, mirando el reloj.
4:15 a. m.
"..largo." Shouto respondió, Izuku levantó el edredón y abrió los brazos, persuadiendo a Shouto para que se uniera a él.
Shouto se quitó su uniforme de héroe e inmediatamente se arrastró hacia los brazos de Izuku, abrazando su cintura ligeramente, un brazo curvándose a lo largo de sus hombros.
"¿Quieres hablar de eso?" preguntó Izuku, pasando sus dedos por el cabello rojo y blanco, Shouto negó con la cabeza.
"No, solo abrázame". Respondió, su nariz presionando el hueco del cuello de Izuku. Izuku asintió y abrazó a Shouto más fuerte contra él, su otra mano todavía jugaba con su cabello y acarició con su nariz los mechones rojos y blancos.
Se quedaron en silencio e Izuku estaba seguro de que Shouto se había quedado dormido, pero se sorprendió por la presión de los labios fríos contra su cuello.
"¿S-Shouto?" preguntó Izuku, sonrojándose levemente cuando los besos continuaron a lo largo del punto de pulso en su cuello, un suspiro estremecido salió de sus labios.
"Izuku ..." Se descascarillaba contra el cuello de Izuku, un soplo de aire helado golpeó la piel, haciendo que Izuku se estremeciera. Shouto presionó otro beso en el pulso de Izuku, arrastrando suavemente sus dientes por él.
Izuku agarró las caderas de Shouto y las hizo rodar para devolver el placentero asalto.
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