Gojo: Un Hechicero en la Sociedad de Almas

Epiologo 4: Predicción

[Mundo humano; Pueblo de Karakura]

En algún lugar de una fábrica abandonada, un hombre de cabello rubio con un abrigo negro se bajó el sombrero en la cabeza, ocultando la frustración y la impotencia en su rostro.

Todo lo que pudo hacer fue maldecir su propia impotencia mientras observaba a sus amigos desplomarse en agonía, haciendo todo lo posible por no gemir por el dolor que los aquejaba.

Una sustancia viscosa blanca cubría lentamente su rostro, transformándose en una máscara blanca.

Cuanto más pasaba el tiempo, más distorsionada se volvía su expresión, y parecían estar a punto de perder el control.

"Ya es suficiente... Tessai".

"Comprendido."

De pie junto al hombre rubio había un hombre bronceado alto y musculoso que llevaba un par de anteojos.

Dando un paso adelante, Tessai adelantó su dedo antes de cruzarlos,

“Bakudo #99: ¡Parientes!” [1]

Inmediatamente, una tela oscura se extendió desde las sombras antes de unir a todas las personas cuyos rostros estaban cubiertos por máscaras.

Una vez cubiertos de pies a cabeza, se añadían varillas de hierro para que la unión fuera aún más sólida.

Cualquier miembro de la sociedad de almas con suficiente conocimiento sobre Kido que asista a este espectáculo se quedaría boquiabierto.

Cuanto más alto era el rango de un Kido, más tiempo tomaba prepararlo.

Requería un enfoque completo, una gran cantidad de Reiatsu y un encantamiento largo y complicado.

Solo las personas en el rango de maestro en Kido, el rango más alto en toda la sociedad de almas, podrían usar Kido en tales niveles sin siquiera molestarse en usar un encantamiento.

Sentado en la cabeza de Tessai, un gato negro murmuró perezosamente: “Realmente no eras el capitán del cuerpo de Kido por nada. Tus habilidades son tan impresionantes como siempre”.

“Por favor, Yoruichi-Sama, tu alabanza me hace más humilde.”

Yoruichi se burló de la falsa humildad antes de mirar preocupado a Kisuke. Habían pasado un poco más de sesenta años, desde el momento en que huyeron de la Sociedad de Almas y buscaron una manera de ayudar a sus amigos.

En este momento, ninguno de ellos podría usar efectivamente su poder sin el riesgo de perder el control. Se vieron obligados a usar cuerpos artificiales especialmente creados por Kisuke y, aunque eso no les impidió vivir una vida normal, para personas como ellos que fueron capitanes o vicecapitanes en el pasado, ser forzados a tal estado no fue diferente. de cortar las alas de un águila.

Es la primera vez que lo veo desconcertado durante tanto tiempo.

Kisuke había estado trabajando en cómo ayudarlos a usar su poder de shinigami, así como el poder de Hollows que obtuvieron de mala gana.

Pero hasta ahora, no ha sido más que un completo fracaso.

Girando la cabeza hacia un lado, pudo ver que uno de los capullos creados a partir de la sombra vinculante parecía temblar. Fue seguido por grietas que cubrían el capullo antes de que una mano se extendiera fuera de él.

*Tos* Tos* "Maldita sea, nunca me acostumbraré a despertarme con esas ataduras".

Sacudiendo la cabeza, Shinji se quejó mientras salía de las sombras.