La escuela y el calzón chino

Hilda

Presumida, altanera, hermosa y elegante. Hilda una chica rica que incluso entre sus dos amigas se ve como la más elegante, más allá de aquellas que permite que las acompañe ve al resto como personas inferiores cuyo único propósito es servirle… 

Jennifer estaba realmente impaciente, dando vueltas por toda la escuela buscando cualquier rastro de alguna de las 3 "guardaespaldas", la emoción la estaba matando e irónicamente haciendo su búsqueda más inefectiva ya que no se podía concentrar y terminaba revisando el mismo lugar varias veces. 

Eso la hizo preocuparse de que quizás no hubieran caído en su provocación, mientras Jennifer se preocupaba una chica apareció detrás de ella y corrió en su dirección a toda velocidad chocando contra ella y mandandola al suelo para después meter su mano en su falda y estirar su ropa interior con fuerza. 

Jennifer quién fue tomada por sorpresa no pudo hacer nada hasta que la chica se bajó de ella tan rápido como llegó ahí y escapó a toda velocidad, si Jennifer no estaba pensando con claridad antes ahora era incluso peor, cegada por la ira corrió a toda velocidad tras la chica. 

Aunque  no tardó en alcanzarla, la chica pudo esquivar con cierta facilidad hasta que se detuvo y se volteó para encarar a Jennifer, ella por su parte estaba más que feliz de finalmente tenerla a su alcance. 

Sin embargo esa ira le jugó en su contra, no le prestó atención a las 2 chicas detrás de ella, y así nuevamente fue tomada por sorpresa y derribada, la que había sido la carnada se les unió y así las tres chicas tomaron su expuesta ropa interior y la estiraron como nunca hasta que en poco tiempo le llegó a la cabeza y ahí se detuvieron. 

Hilda que hasta entonces había permanecido ocultar finalmente se mostró, se acercó a la derribada Jennifer y la miró, en su rostro se podía ver una sonrisa de burla y satisfacción. 

Hilda: Oh Jennifer, creí que eras una bully pero mírate ahí

Jennifer intentaba con todas sus fuerzas liberarse sin embargo ni siquiera ella podía contra la fuerza de tres personas y menos cuando la habían tomado desprevenida, pero aún así no se rindió e intentó abalanzarse sobre ella aún sin éxito. 

Hilda: Hmp, tan incivilizada como siempre, pueden continuar

A su señal las tres chicas continuaron estirando la ropa interior de Jennifer hasta que sobrepasó su cabeza y se la soltaron en su frente finalmente dejándola en un atómico, ese era un dolor que Jennifer jamás había experimentado hasta ahora, quería llevar sus manos hacia su trasero en de manera instintiva pero aún estaba sujetada.

Hilda: Ciertamente, esta apariencia encaja mejor con una bárbara como tu, aunque… 

Hilda se acercó a ella y de rodillas tomó el resorte de su ropa interior y la estiró hasta soltarla debajo de su barbilla, después de levantarse sacó un trapo y se limpió las manos en un gesto de desagrado. 

Jennifer a pesar del atómico pudo ver eso, logrando aumentar más su ira, esto no causó otra cosa más que gracia en Hilda. 

Hilda: Este atómico te queda mejor, así podrás ver tu derrota a través de tu ropa interior, si es que puedes ver a través de eso…. si puedes? 

La ropa interior negra de Jennifer se había estirado tanto que de hecho sí que podía ver a través, un nuevo forcejeo de su parte fue lo que respondió la pregunta de Hilda. 

Hilda: *suspiro* veo que aún no te rindes, supongo que solo me queda humillarte bajo tus términos… liberenla 

Aunque dudaron un poco, siguieron sus órdenes y la soltaron, huyendo tan pronto como su furia se desató, Jennifer respiraba con dificultad y su trasero le dolía pero cuando trató de sacarse el atómico…