Fxck Boys -Namjin

Just friends

Incómodo.

Realmente IN-CO-MO-DO.

No había otra explicación para lo que sentía Seokjin en ese momento, cuando de despertó siendo apretujado por Namjoon.

También es muy necesario agregar que estaban completamente desnudos y aún podía sentir una ligera punzada de dolor en su espalda baja y más allá también.

Tratando de ser lo más silencioso posible se escabulló de entre los brazos de Namjoon y evitó mirar su rostro relajado mientras dormía; esa expresión de niño travieso, tierno y masculino a la vez como solo su mejor amigo podía ser.

No indagó sobre los adjetivos que pensaba para describir a Namjoon y se dirigió a su habitación esperando que el lugar estuviera vacío.

Dejó escapar un suspiro aliviado cuando enfocó su cama despejada de cualquier chica demasiado borracha, sin embargo hizo una mueca arrugando la nariz cuando advirtió el olor a vómito impregnado en la alfombra.

"Maldicion" pensó, eso sería un dolor de cabeza quitarlo, pero no tenía tiempo para eso en ese momento, así que conteniendo la respiración se dirigió hacia su armario donde cogió ropa limpia y una toalla para tomar una ducha y quitarse su propio olor a sexo y sudor.

Veinte minutos después bajó las escaleras e ingresó en la cocina luciendo totalmente fresco y disimulando muy bien el dolor de cabeza.

En el lugar estaba Jimin haciendo un batido que involucraba fresas y unas semillas que parecían más bien comida para aves que un desayuno apetitoso.

—Sacar a tu chica fue una locura. Cada vez las escoges peor —Dijo Jimin sin levantar la mirada de la licuadora.

Seokjin se encogió de hombros sin importarle si el chico podía verlo o no y fue hasta la despensa para sacar un paquete de pan y prepararse una tostada.

—De todos modos no estabas cuando Hoseok hizo la ronda expulsando borrachos y recogiendo latas ¿Dónde dormiste?

—En la habitación de Namjoon.

Seokjin contuvo el aliento por unos buenos cinco segundos esperando que Jimin dijera algo, cualquier cosa, pero el tiempo pasó y el rubio simplemente vertió el contenido entre rosa y marrón claro en un vaso e inclinó su cabeza para beberlo.

Y es que claro ¿Por que Jimin iba a decir algo? Si él mismo había aterrizado más veces de las que podía contar en la habitación de Taehyung o cualquiera de los demás. Seokjin estaba siendo paranoico nada más.

Se relajó esparciendo mantequilla sobre la rebanada de pan, más su tranquilidad no duró mucho cuando escuchó pasos de otro de sus compañeros bajando la escalera y su corazón se agitó pensando que era Namjoon y tendría que enfrentar su sonrisa tan pronto.

Volvió a respirar al ver a Taehyung con el cabello húmedo y un portaplanos colgando en su espalda.

El chico apenas les dio los buenos días y abrió la puerta de la entrada.

Antes de que Jin pudiera pensar en lo que hacía corrió tras él.

—Voy contigo.

—¿Estas seguro? Es temprano aún, debo reunirme con algunos compañeros para un proyecto.

—Si, si, yo también debo llegar temprano —Mintió.

—¿Y Namjoon?

Seokjin bufó por lo bajo. Es verdad que él llevaba al castaño en su auto todas las mañanas, pero ¿debían cuestionarlo siempre que hacía algo independiente de él? Dios, Namjoon no era una extensión de su cuerpo, eran cercanos como todos los demás, los siete igual de unidos, no había nada que los hiciera diferentes precisamente a ellos del resto.