prier.

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El pálido se encontraba dando su primer misa de la semana, ustedes saben, esas misas de mitad de día entre semana. No es como la gran misa dominical.

Min YoonGi era aquel padre de esa capilla no tan famosa, pero muy habituada, entre semana siempre iban las mismas personas gente ya adulta, algunas monjas y jóvenes aprendices. Estaba terminando aquel ritual, juntó sus manos y pidió que repitiera después de él todo lo que decía “Haz que nos bendiga el padre, el hijo y el espíritu santo. Amén”

Hizo aquella típica seña que indicaba el final o inicio de una oración santa “Vayan en paz, a vivir su celebración, demos gracias al señor” con eso podía ver como la gente se comenzaba a retirar y él empezaba a recoger algunas cosas para pasar al cuarto detrás del presbiterio.

A pesar de ser un padre, él mismo sabía que cometía más de un pecado, él sabía que su lugar era el infierno en el que seguro estaría ardiendo en llamas dentro de poco tiempo. Suspiró cansado, siempre hacía lo mismo cada semana, era todo monótono parecía que no tuviera una vida aparte de la iglesia.

Como era costumbre, terminando de acomodar copas y rellenar botellas vacías de vino con sabor a uva, después iba a leer algún párrafo de la biblia.

No podía creer a aquellas personas que hacían darle odio a su prójimo simplemente por ser diferente a lo que es “común”. La mayoría de gente siempre fallaba en aquella práctica que era darle amor al prójimo, solo les importaban las personas ricas, blancas, cisgenero y heterosexuales. Ya que claro "es la definición de normal".

Siempre ha repudiado a las personas así, más a sus padres. Pero siendo YoonGi con un pensamiento que salía de la biblia, que salía de lo que se le inculto desde pequeño ¿Qué hacía siendo un pastor? La respuesta no es tan complicado, fue obligado. Desde pequeño se le fue inculcado que él sería un gran pastor, sus padres querían un hijo que les hiciera enorgullecer ¿Y que mejor que la religión?

Romanos 1:26-27— Dijo con su profunda voz, concentró su vista en la lectura de aquel sagrado libro.

“En la epístola a los romanos, 1:26-27, Pablo de Tarso escribe:
Por eso, Dios los ha abandonado a pasiones vergonzosas. Incluso sus mujeres han cambiado las relaciones naturales por las que van contra naturaleza; y, de la misma manera, los hombres han dejado sus relaciones naturales con la mujer y arden en malos deseos los unos por los otros. Hombres con hombres cometen actos vergonzosos y sufren en su propio cuerpo el castigo de su perversión. ”

Frunció el seño ante lo que había leído, discursos de odio cuando siempre se dice impartir amor, así era la biblia un hueco en cada parte, en cada maldito lado.. Solamente para beneficiar a aquellas personas jodidas.

Cerro con fuera y molestia el libro, posó sus manos sobre su sien y comenzó a masajear, se levantó de la silla y quitó su gabardina colocándola en el perchero. Salió para poder revisar la vacía iglesia, con algunas velas que fueron prendidas. Odiaba ese lugar.

En lo más alto de la iglesia estaba un ser que parecía una sombra, una persona estaba arriba, YoonGi alzó una ceja y se mantuvo al margen. Aquel ser levanto una pierna y se dejó caer desde donde estaba al suelo para así caer intacto.

El ser miro a YoonGi unos momentos y sonrió, pasando su lengua por sus afilados colmillos.

Ayúdeme.. Padre

"rev 22:20" - taegiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora