Celos //Tamaki Y Tú// [Pausada] - _{reescribiendo} _-

第24章

_Amajiki, tienes visitas_ Una oficial de policía se colocó enfrente de una celda para golpear los barrotes 3 veces seguidas.

_¿Uhm? ¿V-visitas?_

_S-s-si_ La oficial respondió burlándose. Tomo las llaves que están en el bolsillo de su pantalón para proseguir a introducir la llave en el candado de la celda.

Al abrir la celda, le coloco las esposas y la traslado a otro lugar para que pudiera ver a la persona que la iba a visitar.

_¿Visitas?, Nadie nunca me ha visitado en muchos años, ¿Quién me viene a visitar?_ Comenzó a pensar demasiado sobre que persona puede estar yendo a visitarla.

Un joven alto, robusto y de cabello obscuro cruzo por la puerta. Al ver al chico la mujer se que quedó muy confundida, aún que a la vez el chico se le hacía muy familiar para ella.

El chico tomo asiento para estar cara a cara con la mujer. Cruzo sus dedos y los recargo en su mentón sin alzar la mirada.

_T-tu ¿Quién eres?_

_Ja- jajaja, ¿Encerio?, no reconoces a tu querido hijo_ Después de reírse alzó su rostro con una mirada fría y directa.

La mujer abrió sus ojos lo más que pudo y su corazón comenzó a acelerarse.

_¿M-mi hijo? No, n-_ Fue interrumpida por el contrario que dió un golpe en la mesa con su mano y hablo con un tono bastante molesto en su voz.

_Si, tu hijo, al que traumatizaste y maltrataste, ¿Realmente no me reconoces?_ El azebache comenzó a mover su pierna ansiosamente.

_¿Maltratar?_ La mujer no le daba la mirada por la impresión.

El peliazul comenzó a desesperarse por esa reacción sin "sentido" de la mujer.

_Tsch, aca-_

_Si, si te r-recuerdo, como olvidar a mi n-niño precioso_ La voz de la mujer comenzó a cortarse y sus ojos se humedecieron levemente

_Como has crecido tanto, ya eres un hombre_ Comenzó a sonreír bruscamente mientras las lágrimas recorrían sus mejillas.

La expresión del azebache fue de asco y repulsión al verla en ese estado.

_Mira, no vine aquí a decir cosas bonitas sobre ti o a darte detalles sobre lo que he echo con mi vida_

_¿Ah si?, ¿Entonces a qué viniste mi amor?_

_Deja de llamarme así_

_Porque lo haría, no sabes lo feliz que me hace que estés aquí Tamaki, y-yo nunca imaginé verte otra vez... No podía hacer nada para contactarte_ La mujer no despegaba la vista del contrario, no parpadeaba con tal de observar cada detalle de su hijo ya crecido.

_Tsch, yo solo vine aquí por respuestas, tengo muchas cosas que debo preguntarte_

_Oww, dime mi vida, que tienes que preguntar, te gusta una chica... ¡Oh! o es un chico, sabes que, ya me callo, dime, ¿Cuál es tu pregunta?_

_...¿Qué?_ La cara de tamaki mostraba confundes por la extraña respuesta de su madre.

_Estas loca_

_¿Por qué lo dices mi niño?, es lo que una buena madre hace, ¿No?_ Las lágrimas caían sin cesar por sus mejillas.

_Fue una mala idea venir aquí, estás enferma_ Ya se comenzaba a levantar de su lugar para retirarse.

_N-no, no te vayas, p-por favor, perdón, me comportare_ Con sus ambas manos comenzó a limpiar sus lágrimas y sonrió hacia el contrario, con una voz entrecortada comentó