Taste Like Strawberries

Capítulo 5: Final

—Voy a salir a hacer unas compras— avisó Sam, tomando las llaves del coche que están colgadas a un lado de la puerta.

Harry levanta su cabeza al escucharlo y sus ojos parecen brillar.

—¿Puedes comprarme galletas de avena? — él preguntó, sonriendo alegremente cuando Sam asiente en respuesta.

—Por supuesto— el alfa peina su cabello y se gira para llamar a su mejor amigo. —Louis, ¿quieres venir?

El castaño levantó su mirada del libro que estaba leyendo y le dedicó una rápida mirada a Harry antes de fijar sus ojos en Sam, Louis negó con su cabeza y fingió una muestra de inconformidad en su rostro.

—Me gustaría, pero debo terminar estos trabajos de la universidad.

Lo último que escucharon, fue la puerta cerrarse después de que el hermano de Harry hubiera salido por esta misma.

Ambos se miraron a los ojos.

***

Hay manos traviesas por todas partes.

Los chasquidos se vuelven rítmicos y lo único que sale de sus bocas son gemidos bajos.

—¡Louis! — Harry gime y su mano de repente se enreda entre el cabello castaño del contrario.

Sucede que, está sentado en una incómoda posición en la encimera de su cocina. Sus piernas están abiertas y Louis está follándolo fuertemente ahora mismo. Hay un charco de lubricante en el piso, tenía miedo de que su alfa resbalara, pero Louis parece tomárselo bastante bien, porque sus embestidas incrementan y ahora lo único que siente es la polla de su alfa entrar y salir de él a un ritmo constante que está haciendo que su estómago se apriete con anticipación.

Terminaron teniendo sexo después de que el omega le hiciera una mamada, arrodillado en el suelo de su cocina, después de que Sam se hubiese ido de compras.

Y sí, ellos han estado cogiendo por dos meses, a escondidas del hermano de Harry.

Saben que deben ser rápidos si quieren evitar sorpresas. Así que el rizado gime y jala los cabellos del alfa cuando el placer lo consume y siente como su próstata es estimulada una y otra vez.

—Fóllame— pide con la voz ronca y cargada de lujuria. —Fóllame, alfa.

Louis ve a su lindo omega tirar su cabeza hacia atrás, cuello brilla por el sudor, los rizos se le pegan en la frente y él ama la forma en la que vuelve a mirarlo, con los ojos brillosos y los labios entreabiertos.

Están siendo demasiado ruidosos, ambos lo saben, así que Louis lo besa para silenciarlo cuando Harry no parece dejar de querer gemir su nombre.

Sus labios se encuentran una vez más y la boca caliente del castaño está haciendo maravillas contra los labios de Harry. Louis lo besa, muerde y chupa hasta arrancarle un gruñido de excitación al más bajo.

—Mantente callado, amor— dice el alfa en su oído.

La pierna del omega se enreda alrededor de la cintura de Louis y bastan unas embestidas más para que el alfa recargue su frente contra el pecho de Harry al sentir su nudo expandirse.

La base de su pene se hincha y él queda dentro de su omega. Las tiras de semen no tardan de salir, corriéndose dentro el condón y Harry finalmente lo hace cuando la mano ágil del alfa se dirige hacia su miembro para bombear, haciendo que el omega manche su propio estómago.

El mayor se inclina, cuidando no lastimar a Harry, para dejar besos cortos por todo su cuello y él aprovecha para acariciar el cuero cabelludo del contrario porque sabe que su alfa ama que él haga eso. Escucha los suaves ronroneos de Louis cuando comienza.