No soy creyente en aquello que la gente habla, no soy creyente de aquella charlatanería del "amor", ¿amor?, ¿enserio?, el amor solo te daña, y te destruye, solo te distrae, de tus verdaderas prioridades, en mi vida no hay tiempo para eso, tengo mejores cosas que hacer que andar en guarradeses pensando en alguien que tarde o temprano me cambiara, el amor no existe, todo se hace por beneficio, ni siquiera yo eh echo algo con buenas intenciones. ¿Enamorarme? nunca.
Sí, eso era mi pensar meses antes de conocerlo, que loco ¿no?, el cómo repudiaba el ver a alguien de empalagoso con alguien más que no fuera con sigo mismo, falta de lógica ¿no?
Bueno falta de lógica es que estés leyendo esto y no entiendas ni un cacahuate.
Así es que toma asiento, porque te contare esta historia, solo ten en cuenta que esta historia no es como los cuentos de hadas, donde todos están felices por todos, no esto solo será una parte de mi vida, mi odiosa vida controlada por mi padre, madre, hermano y por el poder que lleva el apellido que porto.
Para comenzar te contare quien es mi padre, bueno pues el ha venido de una familia que siempre ha sido poderosa e inalcanzable, envidiada por muchos. Mi padre no todo el tiempo fue malo, vengativo, rencoroso y fastidioso, el tubo una infancia difícil, aunque tal vez te preguntes y... ¿quién no?, pero a diferencia de tu o yo a él, es que el tubo que ser educado viendo como su padre mutilaba a otras personas solo para obtener lo que quería, sí, como les dije, esta historia está muy lejos de ser algo por lo que llores, esta será mi vida, en ese inferno al que mi familia llama hogar.
Mi madre por el contario fue criada normal -por así decirlo- ella no era del mismo estándar social que mi padre, si es que eso sigue importando en pleno siglo 21 -aja si ella era la típica niña pobre y el típico niño rico- mi madre trabaja y mi padre no -esta es la parte de sus vidas que si me han contado je, je- cuando mi mama tenía 25 años trabajaba de mesera, todas sus hermanas ya estaban casadas y sus padres ya no Vivian, así es que ella estaba libre por ser mayor de edad, una noche muy inesperada el restaurante fue reservado en toda su totalidad, y el gerente le pidió que fuera ella quien atendiera esa noche, él le informo a ella que sería un joven muy importante, también le dijo que el joven iría acompañado de su cita, ella se preparó como normalmente lo haría.
Rato después llego el joven -muy guapo, ojos oscuros y cabello oscuro, pero su piel tan blanca como la nieve, labios carnosos y un poco de rizos, era alto y con un porte muy intimidante- con una joven muy linda también.
Ella a la entrada
-Bunas noches señor, su...
El la interrumpió, con una sonrisa en sus labios:
-Nada de señor por favor me hace sentir viejo, llámame por mi nombre, -él se inclinó hacia ella- soy Adam Smith, -le tomo la mano y la subió hasta su boca donde él le beso los nudillos.
—y ¿tu cómo te llamas?
En ese instante se vieron fijamente, hubo una chispa, una conexión, desde ahí supieron que estaban hecho el uno para el otro. -que cliché, no me culpen-
Ella se puso roja y bajo la mirada
—Abigail.
Mi madre era y es muy hermosa, sus ojos tal vez no sean claros pero son imponentes, su piel es blanca y su cabello es negro, es delgada en las partes indicadas, él era levemente más alta que ella.
—Un gusto Abigail.
La chica al fin hablo:
—Hey amor, tengo hambre.—lo dijo mientras entrelazaba su brazo con el de ella.
Ajá, si tal vez esa ya les cayó mal, tal vez no, a mí no, ¿porque?, porque gracias a eso mi mama se dio la media vuelta y fue donde el joven Smith le vio el cuu -ríe a carcajadas- creo que el amor es con quien menos te lo esperas, ¿No?, sucesivamente de eso, la compañera del chico se levantó para ir al tocador, mi mama no se movió del al lado de ellos a menos de que le pidieran algo:
ESTÁS LEYENDO
Cuando Se Ponga El Sol © #1 [Trilogía Junto A Ti ✔️]
DiversosDorian y Terryl demostrarán que a pesar de las diferencias sociales todos tenemos un amor echo a la medida, un amor sin limitaciones. Un amor dispuesto a matar. Estó no es otro cuento de hadas, aquí verás que hasta la persona que pensabas que tenía...