Capitulo 2: ¡Tower Pizza!

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Más tarde en ese mismo día. Después de ver la última película de Gray sobre Misterio y Detectives en el Turbo Theatre, Max y Bea se fueron a un establecimiento cercano de comida rápida, la Tower Pizza. El mismo lugar que Surge le había sugerido a Max conseguir un empleo, la chica no le encantaba del todo la idea porque ella creía que valía más para esto, pero por su falta de experiencia no le quedaba de otra.

Cuando entraron al restaurante Max se imagino que tendría un olor desagradable y un piso pegajoso, pero no, para su sorpresa el lugar se encontraba bastante limpio y reluciente, como si la persona de intendencia no le gustaba ni la más mínima mancha de mugre, el interior olía mucho a jabón... Bastante Jabón.

Max: ¡Uff! —Silbó de asombro—. No es tan malo como yo me lo imaginé

Después de observar su entorno, Max se dió cuenta que tenía los dedos pegajosos por el queso de las palomitas, quiso limpiarse untado sus dedos en una de las sillas pero fue detenida por un escobazo en la mano.

Max: ¡Auch! ¿Pero qué caraj...?

Ash: ¡Ejem! Lo siento, aquí tienes algo para limpiarte —Ofreció disculpas regalandole una servilleta.

Al lado de la chica lo que parecía ser un bote de basura parlanchín, de pronto le salieron brazos y patas. Max frunció una ceja viendo al sujetó mientras ke tendía su mano para tomar la servilleta y seguido se limpio las manos.

Max: ¿Te escondes en la basura? Tú... Eeh —Puso sus ojitos chinitos para leer su carnet—. ¿Ash?...

Ash: Lo que haga con mi tiempo no es tu problema. Si van a comer aquí el mostrador se encuentra por allá, y POR FAVOR, sean tan amables de poner la basura en su lugar ¿Vale? ¡Gracias!

Una vez que Ash terminó de hablar, volvió a esconder sus extremidades en el bote de basura. Max y Bea intercambiaron una mirada, pero decidieron no darle importancia y fueron al mostrador a hacer su pedido. Minutos después, estaban sentados en una mesa disfrutando de su almuerzo. Sin embargo, Max parecía no tener mucho apetito; dejó su hamburguesa a medio comer y jugaba con una papa frita en la mesa. Bea notó su mirada pensativa y no dudó en preguntarle.

Bea: ¿Max?... ¿Te encuentras bien? —Al no recibir respuesta levantó un poco la voz—. ¿Me estás escuchando, Max?

Max: Si, te escuchó —Soltó un suspiro y arrojó la papa en la bandeja—. Es solo que pasaron muchas cosas hoy, empujé a alguien por accidente y luego Ruffs me "despidió" porqué disque el se hará cargo del crímen de ahora en adelante. Ahora me acabo de quedar sin trabajo

Bea: Pero yo creí que te gustaba cuidar la ciudad

Max: ¡Me gusta cuidar la ciudad! Pero también me gusta el dinero, jiji —Dijo entre una risa—. Pero ya enserio, sin dinero no podré pagar la renta, no podré comer ¡Además casi muero peleando contra 8-BIT!... Soy una heroína pero vivo como cualquier persona común

Bea: Ya veo... En ese caso... ¡Podrías trabajar conmigo en el Biodomo! Seremos un buen equipo, puedo hacerte un nuevo traje, solo piénsalo... ¡Max y Bea! ¡La abeja y la avispa!

Max: Eww... Digo, ¡Hurra! —No era una mala idea trabajar con Bea, pero ni loca usaría un uniforme de una avispa—. Gracias Bea, pero no me sentiría bien si no lo hago sóla

Bea: Muy bien, supongo... Pero si te animas no dudes en llamarme, si quieres te prestó mi libreta para que veas los bocetos que te hice —Comentó sacando el susodicho cuaderno de la mochila para ponerla sobre la mesa.

Max: Emm, gracias Bea. Luego me tomaré el tiempo para verlo

Sin que se dieran cuenta, una adolescente se acercó a su mesa y se colocó junto a Max, con la intención de pedirle una foto con su celular. Al notar su presencia, Max rápidamente se limpió los restos de comida de la boca y volvió la mirada hacia ella.

El Caos En Supercity | Brawl StarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora