~Sentimientos Encontrados~ [Tan-zen]✓

×1×

-demonio hablando-

"demonio pensando"

-cuervo hablando-

"Persona pensando"

-persona hablando-

*acción*
ו••••••••••••••••••••••••••••••••••×
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Era un día normal como cualquier otro. Los tres chicos, Inosuke, Tanjiro y Zenitsu, acaban de regresar de una misión  que el cuervo de Tanjiro les había dicho que hicieran.

-¡Kentaro ! ¿Tienes algo de comida? ¡Me muero de hambre!-

-¡Es Tanjiro! Y lo siento, pero no, no tengo nada , Inosuke-.

-¡¿EH?! ¡¿Por qué no?!-

Tanjiro suspira ante la pregunta de Inosuke. -No tengo nada conmigo en este momento-.

Mientras los dos chicos discutían por no tener comida, Zenitsu estaba perdido en su propia mente sin siquiera prestar atención a sus otros dos amigos.

Estaba pensando en una chica que había visto mientras regresaba de la tarea. Tenía un hermoso cabello largo y rubio y hermosos ojos azules que pensó que podría mirar para siempre.

"Ella era muy hermosa... tal vez debería haberme acercado a ella y hablar.  No... ella hubiera pensado que yo era un raro o algo así"  Inmediatamente negó el pensamiento.

Zenitsu siempre ha admirado a las chicas tanto por su apariencia como por su personalidad. Le encantan sus rasgos faciales perfectos, el olor agradable que siempre despedían, y escuchar sus voces suaves lo hacia sonrojarse y amarlas aún más. Pero, lamentablemente, cada vez que intenta estar con una, siempre terminan rechazándolo y dejándolo con el corazón apenado. Zenitsu podía sentir que tenía miedo de hablar con una.

-Zenitsu-.

-¿Zenitsu?-.

-¡Zenitsu!-

-¡¿EH?!- Zenitsu inmediatamente salió de sus pensamientos y miró hacia arriba para ver quién lo estaba llamando. Era Tanjiro.

-Zenitsu, ¿te sientes bien?- preguntó Tanjiro.

-¿Eh? Oh, sí, lo estoy, solo estaba pensando en algunas cosas...-

-¡¿Cómo qué?!- preguntó Inosuke, preocupado, aunque no lo admitiera.

-N-Yo um, ¡Nada!- Zenitsu respondió rápidamente.

Inosuke miró hacia otro lado con una mirada no muy satisfecha. Tanjiro volvió su mirada hacia Zenitsu. Los ojos de este miraban hacia el suelo.

-No te preocupes Zenitsu, todos podemos perdernos en nuestros pensamientos a veces-. aseguro Tanjiro.

-Supongo que si...-.

Más tarde ese día, consiguieron algo de comida, lo que hizo a Inosuke muy feliz, por supuesto. Estaban listos para descansar un poco. Inosuke ya se había quedado dormido y Tanjiro estaba revisando a Nezuko dentro de su caja. Zenitsu, por otro lado, siguió pensando en lo mismo que estaba pensando antes.

-¿Y si nunca encuentro a esa persona especial?...- dijo para sí mismo. -¿Qué pasa si no logro proteger a esa persona especial?... ¿soy realmente tan fuerte?...-

Zenitsu suspira. -¿Quién soy yo para pensar que incluso encontraría a alguien?-

Zenitsu pudo sentir que sus ojos comenzaban a humedecerse de a poco. -Mírame... llorando como un bebé otra vez...-.