Tokyo Revengers Chilensis

¡mini historia!

Caminaba hacia mi casa, destrozada con un nudo en la garganta con lagrimas cayendo por mis mejillas. Mi novio mi primer amor el cual supuestamente tanto me amaba acababa de terminar conmigo destrozando mi corazón.

-Ya no siento los mismo por ti, ya no te quiero, terminamos.

recordar sus palabras me hacían destrozarme en mil pedazos y caer hecha polvo para luego desaparecer...lo único que quería hacer en ese momento desaparecer.

al caminar unas cuadras más llegue a mi casa, me detuve en la reja mirando aun en lagrimas  una casa con reja negra color amarillo con una gran ventana en el frente del segundo piso, efectivamente esa era su casa, la vi por unos momentos tomando las llaves de mi casa abriendo la reja y luego la puerta.

al entrar me di cuenta que no había nadie, mi padre aun seguía trabajando me limpiaba las lagrimas que seguían cayendo por mis mejillas pero estas seguían cayendo, cayendo por el, en mi cabeza aun se repetían las palabras que me había dicho.

tire mi mochila en el sillón subiendo por las escaleras de mi casa con la mirada baja viendo las escaleras, pasando por la puerta de mi habitación tirando a mi cama viendo el techo blanco de mi habitación.

mire en dirección a mi escritorio específicamente a su lado derecho donde había una foto colgada en la pared, foto donde estábamos nosotros dos sonriendo en nuestra primera cita la recordaba tal como si fuera ayer, era un mar de nervios aunque el y yo estuviéramos juntos desde pequeños, no de la manera amorosa si no en amistad.

al recordar la cita comencé a llorar con muchas más ganas, ahogándome en mis lagrimas, ahogándome en sus palabras.

termine durmiéndome mientras aun lloriqueaba por la ruptura

ya pasaron días aun me encontraba mal apenas comía, apenas dormía, mi padre se comenzó a dar cuenta de eso comenzó a preguntarme el porque del cambio de mis actitudes de un día para otro, no quería decirle solo pasaba por alto las preguntas, cambiaba de tema o solo le decía que no me pasaba nada y estaba bien.

iba de regreso de la casa de mi mejor amiga la cual le conté todo lo que había pasado, regresaba bastante tarde, mi padre no me podría haber ido a buscar por algunas razones, mi mejor amiga por su puesto me había ofrecido irme a dejar, no acepte ya que mi casa quedaba a unas cuadras y podría venirme sola, no quería molestarla más de lo que lo había hecho escuchando mis lloriqueos.

pase por frente de unos tipos ellos me miraron con unas intenciones no muy buenas, al darme cuenta de que me seguían apresure el paso caminando más rápido casi al punto de correr, ellos aumentaron el paso al par de cuando yo lo hice.

me empecé a asustar bastante, no quería saber o experimentar lo que muy probablemente esos tipos me harían, tampoco que mi padre se echara la culpa de no haberme protegido o peor dejarlo solo.

a este punto ya había comenzado a correr, ellos me estaban alcanzando, mi respiración estaba a mil por segundo mi corazón latiendo en desesperación, divise unas luces que venia por delante, en cuanto más se acercaban vi que eran dos personas en sus motos.

-¡Ayuda por favor!.- atine a decir en cuanto aquellas personas se acercaban, no supe como las palabras salieron de mi garganta.

los tipos que venían tras mío me atraparon, uno tapándome la boca y el otro tapándome con su cuerpo para que las personas en moto no me vieran, el que me tapaba la boca me trato de arrastrar, claramente oponía resistencia.

esas personas se acercaron notando la situación, bajaron de sus motos caminando hacia nosotros uno de ellos lo propino un golpe fuertemente a uno de ellos. eran dos chicos uno pelinegro con el pelo largo, el otro un poco más bajo que el de pelo rubio y un aro en la oreja.