Alive //Creek//

7

El sonido de su celular lo despertó de golpe… no contestó, en su lugar se puso de pie, buscó entre los bolsillos de su camiseta aquel papel que Michael le había entregado y suspiro cuando lo encontró.

Apenas se puso el abrigo salió de inmediato, tenía que buscar a Michael y esperaba encontrarlo en su cuarto porque tenia demasiada pereza como para buscarlo.

—Oh, Hola Craig en qué pue..

No lo dejó terminar, antes, levantó la nota escrita con su puño y letra para que él castaño la leyera.

—No puede ser, entra rápido.

Desconocía el contenido de ese papel pero agradecía el hecho de que convenció al castaño a la primera.

Ahora tenía que ponerlo al día con la nueva información recabada.

—¿Y encontraron el cuerpo de Clyde?.

—En una cabaña como a cien metros de distancia, tenía el cuello cortado.

—Me pregunto ¿Cómo es que terminaron ahí? Dices que está muy lejos de la casa Tweak.

—Yo me cuestiono lo mismo, es demasiado raro, pero no tengo nada al respecto.

Michael tenía una idea, pero está se tendría que utilizar en la siguiente oportunidad (si es que la había), podrían utilizar la séptima para recabar datos de esa cabaña, tal vez haciendo eso resolverían el misterio.

—Bien, es hora de ponerse serios, después del examen vamos juntos a South Park.

—¿Vas conmigo?.

—¡Claro! Me encanta conocer nuevos lugares y tal vez los dos lleguemos al fondo de la cuestión y no tendrás que usar otra "oportunidad".

—Me parece bien.

—Pero tú pagas.

—Ya lo veía venir…

…

Cada que esa hora se acercaba no podía hacer más que ponerse nervioso y pensar en llorar, pero no lo hacía, tenía que ser fuerte, para si mismo, para poder tener a Tweek a su lado.

Aparir de ahora odiaría el periodo entre ocho y nueve porque no hacía más que recordarle el triste final de aquel chico que merecía la mayor de las felicidades ¿Quién podría hacerle algo así?.

—Por cierto ¿Cómo se conocieron? Deben tener una excelente relación como para vender tu alma.

—Por la oportunidad, creo que yo le debo al diablo más que una simple alma, y lo conozco desde que tengo ocho años.

—Eso es mucho tiempo, yo apenas y consigo relaciones de un año como máximo.

Michael era de las personas que no disfrutaba de todo lo que inplicaba mantener una relación formal, eso de los celos no era lo suyo y tampoco gustaba de intercambiar mensajes 24/7. Le encantaba la sensación de libertad pero seguía anhelando una romance como el de los libros que son más toxicidad que amor, claro, quería omitir la primera.

—Ya tendrás algo, Francis puede ser un buen comienzo.

—Primero hay que asegurarnos de que tú historia de amor continúe y si no me invitas a la boda me voy a encabronar.

—¿Cómo sa…
—Vi el anillo en tu mochila.

Dejaron la conversación hasta ahí, tenían que concentrarse y dejar de hablar de cosas del amor… que claro, lo que el mas alto hacía era una muestra del mismo.