𝑷𝒔𝒚𝒄𝒉𝒐𝒑𝒂𝒕𝒉 [Jicheol]

Uno

Nota: Si quieres ver alguna de la imágenes que pondré en cada capítulo, sube el brillo, algunas son oscuras.

-Disfruten el capítulo.🌹

Muchas veces pensamos y nos imaginamos con nuestra alma gemela, siendo felices, y viviendo felices, un sueño hecho realidad, nos imaginamos con esa persona saliendo a citas, dándose cariño, y claro, que esa persona sienta lo mismo que nosotros a ella, que nos sintámos cómodos y felices, sin importar lo que la sociedad diga, pero claro, a veces esa persona que deseamos no está interesada en nosotros, o ni siquiera le importa nuestra existencia, tal vez sea porque esa persona ya tiene a alguien, o también porque simplemente nosotros no podemos acercarnos a ella, por el simple hecho de ser rechazados o por vergüenza a hablarle.

En el caso de Woozi, a él no le importa si le cae bien o mal, si tiene vergüenza o no, tal vez la vergüenza le gane a veces, pero esa persona que tanto ama, la tendrá, sea como sea, en el momento que sea, a la hora y día que sea.

Woozi se encontraba caminando hacia el instituto, aún comiendo su tostada con mermelada, su desayuno favorito junto con un Jugo de Naranja, el cual no podía beber ya que lo había dejado en casa; pasó frente la casa de Seungcheol, era algo obvio que Woozi sabía dónde vivía, pues claro, le gustaba Seungcheol desde el primer día que lo vió.

Llegó al instituto, como siempre, temprano para a dejar pequeños aperitivos en el pupitre de Seungcheol, como por ejemplo, sus favoritos, un jugo de chocolate y unas galletas también, junto con unos sandwiches que él mismo preparaba para Seungcheol.

Ya estaban todos los estudiantes en sus respectivas mesas, unos hablando con sus amigos, otros simplemente jugando sus videojuegos y otros durmiendo o leyendo, Woozi estaba ansioso de ver entrar a Seungcheol, esperaba con ansias ver su reacción al encontrarse con aquellos regalos; los amigos de Seungcheol entraron, como siempre, haciendo un escándalo, detrás de ellos venía Seungcheol, también riendo con ellos, para Woozi, ver reír a Seungcheol era una de las octavas maravillas de mundo, una obra maestra, una pintura que escapó del museo.