Prólogo.

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Micaela Sufiro. 15 años, su cumpleaños es el 23 de enero. Vive con sus padres, aunque estos no tengan una relación muy sana, ella los aprecia mucho. Va a una escuela privada en el norte de la ciudad de Buenos Aires.
Le gusta leer, escuchar música y salir a bailar de vez en cuando con sus amigas.

Agustín Madem. 16 años, su cumpleaños es el 11 de septiembre. Vive con su abuela, sus papás trabajan en el extranjero, casi nunca lo ven ni lo llaman. Asiste a la misma escuela que Micaela, nunca se tomaron el tiempo de conocerse lo suficiente aunque si se cruzaron varias veces por los pasillos. Le gusta salir de joda, tomar, escuchar música y aunque no lo admitiera, le gustaba mucho leer en secreto.


Estos dos chicos, aunque no estén en las mismas clases, se van a cruzar cada vez más y no solo por el destino. En clubes, salidas espontaneas, círculos de amigos, en todo. Pero la decisión de conocerse más estaba en ellos.

O quizás solo querían besarse y olvidarse de todos sus problemas por cinco minutos.

NUESTRO TÓXICO AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora