FOUR¬

549 81 13
                                    

"¿Cómo un alfa podía llegar a ser tan tierno, amable y cariñoso?"


Era una pregunta que muchos del colegio se hacían.

Kim Seungmin, alfa amable, tierno y cariñoso. No se sobrepasaba con ningún omega, ni les tocaba un pelo. No insultaba, no peleaba, era completamente tranquilo.

Aún así, con varías virtudes a su favor, nunca se le había visto con un omega.

Kim era de los pocos alfas que querían esperar hasta encontrar a su pareja predestinada. No le interesaba salir con Omegas con otras intenciones que no sea entablar una amistad.

"¿Cómo un líder de una manda poderosa podía ser así?"

Bueno, no es como que él siempre soñó con ser líder de la manada "B.D.E.S" o su nombre original: "Blood Eyes". Todo fue por culpa de su queridísimo padre.

Seungmin, se podría decir que nació en cuna de oro. Sus padres eran lo contrario a él: Su madre era una omega que sólo le importaba el dinero y el poder. Se creía reina del mundo por ser la omega del alfa más poderoso de Asia.

Y su padre no era la excepción: Un Alfa que le interesaba ganar más y más poder destruyendo manadas poderosas, y algunas que no lo eran. Mataba a los que no le obedecían, o en otros casos, los torturaba.

Aunque hace ya 30 años se empezaron a terminar las manadas; las más poderosas seguían en pie. Rough era una de ellas. 

Hasta el día de hoy, cinco manadas eran las más poderosas y que seguían en pie. En primer lugar estaba Blood Eyes, en segundo lugar Rough, Tercer lugar Beast, cuarto lugar T.N.X y último lugar Peek. 
Manadas rivales y que estarían dispuestos a arriesgar su vida sólo por estar en primer lugar.

A Seungmin nunca le interesó el tema de ser líder de la manada. Matar, torturar, pelear, y todo lo que le decía su padre para ser un buen líder, no le parecía del todo bien. 


Poder en los demás.
─ No le interesaba.


Nunca fue lo que su padre quería, pero no cambiaría.

Quizás no era un alfa frío, terco o temible. ¿Qué más da? ¿Acaso debía seguir los estereotipos que ponía la sociedad?

Los estereotipos eran algo que él odiaba. Se podría decir que eran creencias que ponían la sociedad, además, a través de esto se catalogaba a los demás. Si eras alfa pero eras tierno o amable, eras un alfa defectuoso.

.

.

.

─ ¿Entonces... Qué hago para acercarme a Jeongin? ─ Seungmin se tira a la cama y abraza una almohada. Mira a la alfa que estaba a su lado, su hermana mayor.

─ ¿Y qué quieres que te aconseje? No sé como ayudarte, Seungmin. ─ la alfa pelicastaña se recuesta al lado del menor.

─ Chae, Mina era igual que Jeongin, ¿Cómo hiciste para acercarte a ella? ─ Chaeyoung empieza a pensar y buscar una respuesta.

─ Pues, caminando donde ella ─ Seungmin hace un puchero. ─ Sólo sé tú mismo, Kim, si te vas a acercar a él, hazlo a tu modo.


Nunca mejor dicho.

"- Me podrías también ayudar, eh".

Jaja, no, gracias.

─ Por cierto ─ Chae se para y se dirige a la puerta de la habitación de Seungmin ─ Hoy te toca lavar los platos. Adiós. ─ salió corriendo.

─ ¿¡Qué!? ¡Chaeyoung, te tocaba a ti! ─ hace de nuevo un puchero.


.

.

.

.


Sweet Or Cold - SEUNGINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora