5 : Ciudad Yi

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Siguieron la atracción del espíritu de la espada hacia el oeste, internándose cada vez más en el campo, primero a espada y luego a pie, cuando Lan Zhan empezó a sentir que se acercaban.

Era incómodo caminar con Lan Zhan, que a veces parecía inconsciente de la ventaja que le daban sus largas piernas. Era increíble pensar que Wei Wuxian había sido una vez así de alto sin siquiera darse cuenta. Antes habían estado igualados en altura, fuerza y habilidad. Ahora Wei Wuxian apenas llegaba a los hombros de Lan Wangji y tenía que dar dos pasos por cada uno de los de Lan Zhan.

Lan Zhan era normalmente tan solícito que no suponía ningún problema, pero cuando estaba pensando en otra cosa, a veces, como ahora, concentrándose en el impulso del espíritu de la espada, Wei Wuxian se encontraba luchando cada vez más para mantener el ritmo. Intentó no dejarse irritar, pero cuando se hartó de saltar cada tres pasos se dejó llevar por el retraso, preguntándose de forma pasiva-agresiva cuándo se daría cuenta Lan Zhan.

Él no se dio cuenta, siguió avanzando a grandes zancadas, con la cabeza alta, la túnica blanca como la nieve, perfecta, pura e intocable. Wei Wuxian sintió que una ola de emoción subía en él y la reprimió con rabia. Estúpido, estúpido, estúpido, pensó, tratando de no arrastrar los pies, tratando de no poner mala cara, tratando de no sentirse como una estúpida niña mimada.

Finalmente, Lan Zhan se volvió, confundido, y lo vio, y su rostro se arrugó de preocupación y volvió a caminar hacia él, estúpidamente rápido con sus estúpidas y largas piernas. "Wei Ying", dijo.

"Ya no puedo caminar tan rápido como tú", dijo Wei Wuxian, haciendo todo lo posible por sonreír y parecer indiferente.

"Mn", dijo Lan Zhan y metió la mano de Wei Wuxian en el pliegue de su brazo.

"Lamento ser tan lento ahora", se oyó decir a Wei Wuxian.

"No", dijo Lan Zhan. "La culpa es mía. ¿Quieres que lleve al bebé?"

"De acuerdo", dijo Wei Wuxian, y desataron al bebé del pecho de Wei Wuxian y lo ataron al de Lan Zhan.

Lan Zhan sonrió al bebé, le metió una mano bajo el trasero y lo hizo rebotar un poco. El bebé se rio.

"¡Oh!" dijo Wei Wuxian, y todo su fastidio se desvaneció. "¡Se rio! Lan Zhan!"

"Mn", dijo Lan Zhan, mirando con cariño al bebé.

Wei Wuxian puso su mano en el brazo de Lan Zhan y comenzaron a caminar de nuevo.

"Lan Zhan", dijo Wei Wuxian, "¿cómo sabes cuidar a los bebés? Cuando encontraste a A-Yuan en el mercado no sabías qué hacer".

"Le pedí a mi shijie, que tenía bebés, que me enseñara".

"¿Eh? ¿Lo hiciste? ¿Antes de encontrarme?"

"Mn", Lan Zhan aceptó.

"¿Pero por qué?" Wei Wuxian presionó.

"Quería adoptar un bebé".

"¿Pero por qué adoptar?" Preguntó Wei Wuxian. "¿Por qué no tener bebés propios?"

"No quería..." Lan Zhan hizo una pausa. "No había nadie con quien quisiera casarme".

"Xuefeng dijo que la casamentera intentaba emparejarte con tu shimei".

"Mn. No quería casarme con uno de mis shimei".

"Hm. ¡Supongo que es algo bueno que no lo hicieras ya que terminaste teniendo que casarte conmigo!"

"No tuve que hacerlo".

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