Bell Cranel - No Hay Otra Oportunidad -

"Anhelo"

-Ver el gremio me trae buenos recuerdos...

Bell se encontraba dirigiéndose al Gremio, al estar cerca del lugar, se encontró mirando lo vació que estaba a diferencia de lo que estaba en su tiempo, pero Bell ya sabia que esto era por "Evilus", ataques en el calabozo, muertes cada día, cualquier persona dejaría la vida de aventurero.

-Bueno... ahora entrar sera mas fácil, así que... 

Bell sin darse cuenta en su campo de visión entro una persona que pensó no encontrarse tan pronto.

-Ella es...

Una niña de cabellera dorada, estaba corriendo rápidamente, Bell al instante sintió que su corazón latía con mucha fuerza, y al instante, en su cabeza pudo ver a Aiz en sus brazos muerta.

-El lugar donde esta yendo es...

Al ver por donde se dirigía la pelidorada, se sorprendió, dejando salir una sonrisa y a la vez un suspiro.

-La muralla... Debería ir a ver qué hace, o solo dirigirme al gremio?...

Viendo como la pelidorada se alejaba cada vez mas, simplemente comenzó a seguirla, mientras la seguía, pudo ver que estaba llorando, cosa que el peliblanco se preocupó.

-Que habrá pasado para que este llorando?... Debería ir a verla?... O solo no intervenir?... Incluso estas pequeñas cosas harán un gran impacto.

Bell no sabía los pequeños sucesos que pasaban detrás de la gran masacre que está por acercarse, como por ejemplo, ahora que está viendo cómo Aiz estaba sentada llorando ocultando su cabeza en sus piernas, mirarla le hizo recordar una escena que paso después de declararse a esa chica que tanto anhelo.

"Si esto la ayuda no me arrepentiré, veamos que sucede con... Aiz"

Al ponerse a su costado rápidamente, escucho algo de lo que podría estar pasando.

-Yo...solo...*SNIF*... quiero...ser... más... fuerte.

En el pasado Aiz le dijo que hacía todo lo posible para ser más fuerte, desde pequeña ella hacia hasta lo imposible para ser fuerte, pero ella cambio cuando lo conoció, y que esa llama negra que estaba en su corazón, que ansiaba poder, iba desapareciendo gracia a el.

"Parece que está más metida en sus pensamientos, que ni se da cuenta que estoy aquí"

Viendo que Aiz aún no se daba cuenta de su presencia, saco el cuaderno que tenía en su mochila y empezó a escribir algunas palabras para que pudiera comunicarse con Aiz, ya que hablar no es una opción viable, tocando levemente su hombro, hizo que está saltará y se pongo en guardia rápidamente.

-Ahh!!!

Comenzando a atacar al peliblanco, el cual esquivaba todo rápida y elegantemente, cosa que fue notado por la rubia la cual uso toda su fuerza y volvió atacar, Bell al ver que la velocidad del ataque aumentaba simplemente suspiro.

"Cómo las cosas terminaron así, solo vine a ver qué le pasaba, y ahora estoy esquivando todos sus ataques"

Agarrando con las yemas de sus dedos la espada de Aiz, está se sorprendió por ese acto por lo cual jalo con fuerza su espada para volver atacar, pero grande fue su sorpresa que no podía mover su espada ni un centímetro, empezando a jalar ahora con ambas manos para atrás, pero sin conseguir éxito.

-Suelta mi espada...

Aiz al instante lanzo una patada dirigida hacia Bell con todas su fuerzas, pero Bell vio esto en cámara lenta, alzando un dedo, detuvo la patada de Aiz, a lo cual esta se sorprendió.