One Shoots || Tokyo Revengers

❥Haitani Ran

Baje del coche y entre al edificio de oficinas en El que se encontraba Ran. Llegaba tarde al trabajo y se le olvido la comida en casa así que me envió un millar de mensajes hasta que accedí a llevárselo a la oficina

-Soy yo Ran- Dije después de llamar a la puerta. Un rato de silencio después tan abrió la puerta del despacho y me invito a pasar- aquí tienes, pesado-

Me acerque a su escritorio y sobre este deje la bolsa con la comida. No lo noté, pero cuando entre él volvió a cerrar con seguro la puerta

-¿Que es?-

-Pollo con curri-

-Hmm tengo hambre de otra cosa la verdad- dijo-

Antes de que le pudiera replicar se acerco a mi a pasos largos y me acorraló contra El escritorio

-Ni hablar, estas en El trabajo- Le dije-

-No podre trabajar bien con este calentón encima- Dijo en tono burlón acercándose a mi cuello-

-R-Ran-

-Shh-

Cerré la boca, mas bien mordí mis labios ya que había empezado a besar mi cuello de manera lenta y húmeda

-Querias que viniera para esto ¿verdad?-

Una risa ronca chocó directamente con mi oído e hizo que mis piernas flaquearan
Mientras besaba mi cuello puso las manos sobre mis muslos, subiéndolos hasta introducirse en la falda de mi vestido de verano

-Siempre he querido follarte aquí-

De un tirón tiro de mi ropa interior, bajando mis bragas y dejándolas en El suelo, arañando mis muslos en El proceso

Apretó mis muslos y me subió saliendo por fin del hueco de mi cuello
Me miro con ojos brillantes de excitación y los labios húmedos y rojizos, esto me empezaba a gustar
Esta vez yo ataque sus labios y le bese de manera acelerada, sin pausa, mordiendo suavemente sus labios y El haciendo lo mismo con los mios

Sin romper El beso fue hasta la silla de su escritorio y se sentó, dejándome a horcajadas sobre El.
Rompí El beso para quitar su corbata y desabrochar un par de botones de su camisa para poner lamer y succionar la piel de su cuello, clavículas, hombros...

El tomó la corbata que yo había dejado sobre El escritorio y con mucha delicadeza ató mis manos en mi espalda. No opuse ninguna resistencia y es que los dos sabíamos que eso me gustaba. Un nudo profesional y apretado juntaba mis muñecas e inmovilizaba mis manos

Sus manos fueron de las mías a mis gemelos, muslos, la parte interior de mis muslos y hasta encontrar mis labios menores los cuales apretó con firmeza

Por aquel gesto mordí su cuello para reprimir un quejido
El con su mano libre tomo mi cuello y me empujó hacia atrás, separándome de El y poniéndome frente a El, mirando mi rostro sonrojado
Mi pecho subía y bajaba y aquel escotado vestido hacia que ran lo notara y sonriera de lado

La mano de mi cuello bajo hasta mi cintura y la apretó, la otra mano empezó frotar mi zona sin fuerza, de manera lenta, desesperándome mas con cada roce

Sus largos dedos paseaban por mis pliegues como si fueran su rutina diaria, que casi lo era.
Mis fluidos no tardaron en aparecer y aun que no quería manchar nada a Ran no le parecía molestar en absoluto la humedad de entre mis piernas

Hice mis manos un puño y clave mis uñas en las palmas de estas
Mis labios empezaban a doler de morderlos tanto y mis ojos estaban entrecerrados, con la visión algo borrosa de la cara traviesa y satisfecha de ran