Capítulo 2

89 9 0
                                    

Pasadas unas horas Khalida salió del foso donde la habían enterrado, limpiándose el polvo que tenia encima, se limpió la cabeza quitándose los trozos de tierra del pelo, suspiró y rió de manera exagerada.

-Asesinos de pacotilla.- dijo entre risas en medio del bosque.

Esta empezó a caminar hacia su casa, su misión era torturar a Rebeca principalmente, luego se ocuparía de su asesino, cuando llegó a su casa la sangre que había en el suelo volvía a su cuerpo entrando por las heridas aun abiertas, cuando se recuperó un poco subió al baño a ducharse y quitarse la mugre que tenia encima, cuando ya estaba limpia se puso el pijama, era bastante tarde, miró la hora, era media noche, esta preparó el muñeco en su mochila junto a los libros que tocarían ese día, se estiro en la cama mirando hacia el techo, no podía dormir, toco su cintura al recordar las manos de su asesino, sonrió recordando como la mataron de manera tan patética, giro su cuerpo quedando cara a la pared pero allí vio la sombra negra.

-Mi señor que...- este adopto forma humana y la tomo del cuello poniéndose encima de ella, esta asustada miro con terror al hombre encima de ella.

-Recuerda, al tercer día a las tres y treintaitrés de la mañana me tienes que dar un alma pura y a su misma  vez corrupta, no me falles o volverás conmigo a tu infierno y creo que no quieres revivir esa escena una y otra vez sin fin.- sus ojos rojos miraron fijamente a Khalida.

Esta negó con la cabeza cerrando los ojos, sintió como su cuello era liberado, se levanto de la cama buscando en el cajón de su escritorio donde guardaba el cabello de su victima, un alma pura pero a su vez corrupta, esta ato el cabello a un muñeco hecho de heno, tomo una cuchilla y corto la punta de su dedo manchando la cabeza del muñeco.

-his verbis fascinatus es damnatus misericordiae meae videri, non poteris effugere donec cor tuum recedat.- La sangre del muñeco  comenzó a quemarse poco a poco soltando humo que se dirigía hacia la casa de aquel chico de ojos azules que se encontraba besando de manera apasionada a Rebeca, pero cuando el humo entro en sus fosas nasales se alejo de ella.

-¿Que ocurre bebe?- pregunto mirando al chico, pero este no la miraba.- ¿He hecho algo mal?- se acerco a el pero este la aparto.

-No, es solo que aun no estoy listo.- la chica se sentó en la cama poniendo los ojos en blanco, tomo su ropa y empezó a ponérsela.

-Siempre es lo mismo contigo, llevamos tres años así, no quieres perder tu virginidad conmigo ¿o que?- esta solo le miro unos segundos, el no dijo nada.- Maldito virgen.- se fue de aquella casa molesta con su pareja.

-Eso es...- contesto el para si mismo.- no te quiero a ti, quiero hacerlo con Khalida.- sonrió al decir el nombre de aquella chica.

Este se recostó en su cama y empezó a imaginarse como seria perder la virginidad con ella, pudo sentir como su miembro se ponía duro ante las cosas que se le venían a la mente, bajo su mano y puso el trozo de carne entre ella, haciendo un vaivén suave al comiendo, suspirando y soltando leves gemidos, dijo el nombre de la peli negra, su movimiento se intensifico, en cuestión de diez minutos se vino en su mano manchando su ropa interior, rápidamente tomo un pañuelo y limpio lo que pudo, se quito la ropa interior y la puso en el cesto de la ropa sucia para lavarlo, suspiro pesado, se puso ropa interior nueva y se recostó de nuevo, cerro los ojos y se quedo dormido en cuestión de segundos.

A la mañana siguiente Khalida se levanto de mala gana, no sabia si su amarre había funcionado, camino hacia el baño se ducho, se lavo el pelo, cuando termino se enrollo una toalla en l cuerpo y el pelo, se cepillo los dientes , salio del baño y ponerse ropa, unos jeans negros y una sudadera que le quedaba hasta las rodillas y unos botines negros, se quito la toalla de la cabeza secándose el pelo con el viento, tomo su mochila, sin olvidar el muñeco de rebeca.

Satánica (Ghostface)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora