Un paso a la vez

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Holaaa! Bueno eh yo soy nueva en esto así que venía a aclarar cosas:
1-Perdón si encuentran algún error ortográfico.
2-no me juzguen es la primera parte de un libro que eh escrito.
3-perdón si está muy corto, repito, no se mucho de esto.
4-si ven algún error por favor corríjanme :D

Creo que nada más, en fin, espero disfruten este libro...

Aunque suene ridiculo, esta historia no comenzó con la clave del Wifi, Si no con un simple paseo de perros.

¿Por donde empiezo?

Pues por el comienzo estupida.

Bueno.. volvamos un poco al pasado.

Tal vez, demasiado al pasado. Bueno hace dos años, ¡guao! ¿cómo es que ya pasaron dos años? Bueno.. volvamos hace dos años, una semana antes de que empiece mi tercer año.

Papá estaba fuera de casa como de costumbre, vivo con mi padre en las calles de Nueva York, papá es un empresario no famoso pero ganaba bien y vivíamos en un penthouse de 3 pisos, gracias a él trabajo que tenía papá, casi nunca estaba en casa, normalmente no lo encontraba cuando llegaba de la casa de mis amigas o a veces cuando llegaba del instituto cuando no estábamos en vacaciones

-odio mi vida.

-pues yo te tengo envidia- dice, clara, mi mejor amiga desde que tengo memoria.

-es solitario, créeme no te gustaría tener mi vida.

-Lea eres una exagerada- me dice en un tono de sarcasmo con frialdad -¿sabes lo que darían otras personas por tener lo que tu?- no lo tomes a mal, me alegra tener un techo sobre mi cabeza, comida, agua.. y todas las comodidades que quiera tener.

Pero no es lo mismo... sin amor. A pesar del amor que me demuestra papá, las pocas veces que lo veo, siempre he querido encontrar a una persona que me demuestre amor o alguien para amar.

-quisiera un perro- me digo a mi misma con la cabeza mirando al suelo, apoyada en la pared de espaldas -quizá así tengo a alguien a quien dar amor todos los días sin pedirme nada a cambio a parte de mimos y comida.

Noto como clara abre la boca para hablar pero no logra decir nada porque su teléfono suena una melodía muy contagiosa que la hace bailar un poco antes de contestar.

-ok

-ok

-ok

Después de colgar su teléfono, habla, -mamá a llegado por mi, te dejaré los apuntes aquí.

-Gracias.

-no puedo creer que no hayas hecho la tarea que dejaron hace tres meses cuando anunciaron las vacaciones de verano- me dice clara -yo si- le respondo con un tono un tanto frío pero triste.

Clara se despide de mi con un abrazo que casi me asfixia.

-nos vemos!

Clara se va, dejándome más sola de lo que ya estaba, así que después de copiar un poco la tarea de clara decido irme a dar una vuelta al parque de la esquina, es una zona calmada asi que nunca me preocupo de que me pase algo, aun asi no se lo digo a papá.

Cuando llego al parque noté que había una campaña de adopción de mascotas. Fue casi como me leyeran la mente. Así que decidí ir a hechar un ojo pero una pequeña vocecita en mi cabeza sabia que no saldría de ese lugar sin un animal en brazos.

Cuando llegue a la parte de la campaña, noté que habían más animales que perros y gatos, también habían conejos, hamsters, cuyes e incluso me encontré algunos reptiles.

Sabia que no quería un reptil, no sabía cuidar de un hámster o cuy, y no me gustaban mucho Los Gatos, así que me fui directo a la zona de perros, que muy curiosamente no estaba tan lleno como la zona de reptiles.

Allí encontré todo tipo de perros, incluso me dejaron jugar con uno que otro. Pero mi atención total se la llevo una pequeña bola de pelo, con su pelo de color negro oscuro con partes blancas, y unos ojos azules que podría haber jurado que son (si lo son y lo serán) los ojos más lindos que e visto en mi vida. Me acerqué a él y me dio una sensación que nunca había sentido en el estómago cuando levanto la mirada y empezó a mover la cola de un lado para el otro muy rápido y sacar su pequeña lengüeta.

Después de unos mimitos, llamé a una chica de unos veinticuatro años que tenía un mantel con el nombre de la campaña. Y ella se acercó con una sonrisa muy amable -buenas tardes, ¿en que puedo ayudarte linda?- -buenas tardes, quisiera saber más de este pequeño le dije señalando a la bola de pelo que se levantaba en dos patas para agarrar mi mano y pedirme más mimos.

-claro! El es Luke, es de la raza border collie, tiene 3 meses, nació el 24 de abril de este año y le encanta jugar con las botellas de plástico.

Sinceramente no supe que decir, uno porque estaba ocupada haciéndole mimos a Luke (que se ahora es su nombre) y dos porque no sabia que decir exactamente.

-¿deseas llevarlo contigo?- me preguntó con una sonrisa muy amable -la verdad no se si pueda... no le he dicho nada a mi padre.-

-es una lástima..- me dijo con un tono muy decepcionado que me hizo levantar una ceja y mirarla.

Ella al notar que la veía algo confundida dijo -mañana lo dormirán sino se lo llevan hoy...-

Me quede helada.

La sensación de que este pequeño no tendría un hogar me partió el corazón. El no merecía eso...

Y Sin pensarlo bien le dije que me quedaría con el...

¡Vale! Si estaba muy feliz no lo negaré, pero sabía que no debía hacerlo, por lo menos no sin antes preguntarle a papá. Pero en ese momento lo que menos me importaba era papá.

-eso es genial- me dijo mientras sacaba a Luke de la jaula y lo llevaba hacia un lugar donde habia otra chica detrás de un mostrador. Después de unos minutos de estar ahí y que me explique algunas cosas sobre el para que no me preocupe, también me dio una correa para llevármelo más cómoda, pero aún debía comprarle muchas cosas más.

Así que me fui a una veterinaria, primero a que lo revisen para saber si estaba bien. Por suerte las chicas de la campaña me dijeron que ya estaba vacunado de todo lo que necesitaba y no tenía que preocuparme de ello. El veterinario me dijo que el estaba perfectamente bien de salud. Así que después de ese chequeo le compre las cosas que le faltaban. Por suerte lleve dinero con la intención de comprarme algo en la feria que había en el parque hace una semana. Pero termine como madre. Que irónico.

Al llegar a casa, no estaba papá (lo cual no me sorprendió) así que me pasó toda la tarde arreglando las cosas de Luke, jugando con Luke y enseñándole trucos.

Jugamos toda la tarde, tanto que se fue hacia su plato de comida vacío y me vio con una cara que parecía que no había comido hace meses, pero lo alimentaron hace horas, en fin, se parece a mi.

Después de ponerle comida y agua a su plato, espere pacientemente a su lado que terminará para esconder el plato cuando llegue papá.

Y nos fuimos a dormir, esa noche dormí tan feliz que no me imaginaba el desastre que iba a ocasionar mañana, hasta que llego mañana.

-¡LEA ADA SMITH!

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