〘༽CAPITULO 1༼〙

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Comienzo

A ver, a ver, ¿a ver por dónde comienzo?

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A ver, a ver, ¿a ver por dónde comienzo?...

Así, tal vez por la parte en la que estoy corriendo a toda velocidad para salvar mi vida, si escucharon bien ¡PARA SALVAR Mi VIDA!

je, je

Este es otro momento normal en la vida de esta señorita llamada Helena.

Déjeme les cuento por qué me encuentro en esta fantástica situación y que es lo que le me está persiguiendo ahora mismo, bueno empecemos que lo que tengo atrás, pues es nada más y nada menos que un dragón si oyeron bien, un dragón, pero no cualquier dragón este es un dragón beta esos que son bien agresivos, si esos mismos.

¿Por qué me persigue?
Pues...

-Oye Helena, no vallas ahí-me dicen- Hay un dragón beta, ten ¡cuidado! -Me gritan.

-Si, si cuidado- digo girando los ojos-cuidado, hay un dragón beta ahí - imito su voz.

Nunca eh visto uno en persona dicen que son peligrosos y agresivos, pero yo tengo un don para caerles bien a los animales je, je así que a mí no me hará nada...

Bueno, además, no pienso acercarme mucho solo lo veré desde lejos sin que se dé cuenta...

Subo una de las escaleras de piedra que hay por aquí, hasta que veo la orilla del foso. Camino hacia el centro hasta que puedo ver hacia abajo, no es muy profunda y....lo veo, ¡sí!.
Pero solo puedo ver sus alas, así que me acerco un poco más y...

-Mierda.

Es lo único que se escapa de mis labios cuando caigo hacia abajo.

Bueno y creo que no le gusto mi compañía... Porque me está persiguiendo y no para saludarme, eeh.

Llevo corriendo 5 minutos, cuando por fin veo el bosque para poder perderlo de vista.

-Maldición no son tan agresivos en esta época del año.

Según mi maestra los machos se relajan un poco más hasta se dejan acariciar de alguien no experto.

¿A lo lejos puedo distinguir a alguien sentado en una rama, un rayo de esperanza? ¿O tal vez yo sea su rayo de desgracia? Naa, quien sabe je, je

-hey- no me escucha -¡HEY! ¡! HEY!¡

Cuando voltea puedo distinguir a una figura femenina, cuando la chica de cabellera negra mira atrás de mi frunce el ceño, en foco mis ojos bien y la reconozco.

- ¡IRENE!, ¡¡IRENE CORREEEE!

- ¡Oye, pero en qué diablos te metiste ahora! -dice ella cuando me poso a su lado.

-Ya sabes cosa de todos los días je, je

- porque no me sorprende-dice ella dándome una pequeña sonrisa.

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