Meteor Garden y T/N. (Adaptación)

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Pov. Narradora

Había terminado por fin la exhausta semana de nuestra ocupada protagonista, eso significaba regresar a sus clases en la Universidad.

Daba gracias a Dios, porque dentro de poco aquella pelinegra antes rubia, por fin iba a terminar sus estudios y se dedicaría al 100%  en los asuntos de su empresa y de la de su familia. 

Eso significaba infinidad de viajes, pero al menos ya no tenía que preocuparse por entregar algún ensayo de quien sabe cuantas palabras.

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Por fin era lunes y el regreso de la hermosa Tn a la Universidad fue muy esperado, o eso era lo que demostraba todo el revuelo que habían ocasionado las chicas y los chicos de aquel prestigioso institituto.

Por fin había terminado de pasar a todos los alborotadores y una notificación aparecio en su teléfono, lograndole notificar una llamada de su madre, rapidamente contesto y su madre como siempre presiono la opción de videollamada logrando ver a la muchacha unos kilos más delgada, ocacionando mucha preocupación en la mayor.

Algo que se tenía que saber era que cuando aquella primogenita se encargaba de algo, siempre lograba satisfacer al 100% todas las expectativas de todos los individuos, aunque ponga en juego su salud, ya que algunas veces olvidaba comer e incluso dormir.

Pero como siempre decia la pelinegra "Si no lo hago yo, quien más va a lograr la perfección"

Esa frase que su hermana amaba y que padres odiaban, aquella frase la había ayudado a perder exactamente unos 6 kilos en solo una semana.

Por eso su madre quería que su amada hija se consigiera un marido y si fuera un chef mucho mejor, quería que alguien cuidara a su hija cuando ella no pudiera, y cuando por fin conocio a Si, sabía que aquel muchacho iba a ser el esposo perfecto para su hija.

Dios!! Hija te dije que comieras bien!-hablo exaltada la mayor.

Mamá estoy bien, en serio-coemento relajada Tn

No nada de eso! Queiro que subas todos los kilos que bajaste, entiendes? -reprendio la mayor

Esta bien mamá yo me encargo, pero te tengo que dejar estoy en la Universidad y ya voy a entrar a clase -respondio la pelinegra.

Su madre rapidamente entendio la situación y se despidio con un te amamos y extrañamos.

Tal vez no era cierto que tenía que entrar a clases, pero estaba en la Universidad, así que no todo fue mentira.

Sin dudarlo Tn se dirigio al salón de Bridge y al entrar se encontro con la cara sonriente de tres chicos, cosa que preocupo a Tn, pero despues esas sonrientes miradas desaparecieron y se volvieron en una de completa preocupación.

Si fue el primero en ir a recibirla, llego y la abrazo como si no la hubiera visto en años y despues de aquel dulce abrazo totalmente correspondido por la pelinegra, la miro con cara de regaño y sin pensarlo la llevo a la cafeteria, mientras en el recorrido iba siendo regañada, mientras tanto los otros dos chicos los siguieron sin pensarlo.

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